
Que no te engañen sus playas de arena fina y sus aguas cristalinas... Benicàssim no es sólo turismo de sol y playa y puede ser la mejor opción para descubrir un lugar fascinante durante todo el año.
Consciente de su belleza, sus posibilidades y el espectáculo de luz y color de esta zona, ya en 1887 este municipio de la Costa de Azahar de Castellón comenzaba a considerarse un lugar de ensueño. Palacetes con jardines y cierto aire colonial. Todo ayudó a que allí comenzaran a establecerse en este lugar al que por su fisonomía y su buen gusto, se le conoce como 'El Biarritz Valenciano'.
Pero sus más de seis kilómetros de aguas casi paradisíacas y su magnífico microclima, a caballo entre el sol y el fresco, no deben eclipsar los otros tesoros que Benicàssim alberga. Como resultado de su exquisita arquitectura, 'La Ruta de las Villas' nos sumerge en la corriente arquitectónica de los primeros residentes y de sus 51 obras de arte habitables, que nos trasladan a la época de la Belle Époque.
Pero, ¿es posible no relacionar Benicàssim con sus famosos festivales de música? La localidad es sede de nada menos que 11 festivales que abarcan diferentes corrientes musicales. El XIX Festival de Teatro con Buen Humor, el II Festival Lírico Ópera Benicàssim, el XII Festival de Bailes de Salón, el XXVII Festival de Habaneras, la Tercera Edición del Rototom Sunsplash, dedicado a la música reggae, y el archiconocido FIB, que este año celebra su décimo octava edición, son los principales.
Y si eres un amante del trekking y el senderismo... ¡Benicàssim es tu lugar! El Desierto de Las Palmas con 3.200 hectáreas protegidas alberga nueve rutas de senderismo diferentes ¡Contempla las mejores vistas del litoral desde una de ellas!