Un día vas a la peluquería de siempre y tu peluquero te pregunta, "¿tu padre es calvo? No, no te lo digo por nada, sólo que te vengo notando que cada día tienes el pelo más fino y que las entradas han crecido un poco"... cómo que no me lo dices por nada, ¡me acabas de amargar el día! O no. Piénsalo bien, ser calvo tiene su punto y nosotros te vamos a dar los porques.

Son más

La estadística no engaña: el 70% de la población española masculina tiene problemas de alopecia, y es la última vez que usamos la palabra problema, que son muchos. Tan sólo tres de cada diez españoles mantienen la melena intacta y seguro que más de uno, después de leer esto, está deseando pasar a engrosar ese 70%. Pobres de ellos.

Higiene y comodidad

Me negarán que no tienen que ser felices aquellos que se duchan con el gel de la cabeza a los pies. Olvida el champú y hazte con un buen gel que te deje la cabeza reluciente. Eso sí, hidrata el cuero cabelludo, que por norma es mucho más sensible que el resto de la piel de la cara (ha estado menos expuesto) y te puede provocar alguna reacción no deseada.

Los calvos ahorran más

Lógica aplicada al monedero. Si no tienes que ir a la peluquería, no gastas en champú, la gomina se quedó en el olvido y te haces con una buena máquina de rapado o con cuchillas (que no son precisamente caras), tu economía mensual lo tiene que notar. Eso sí, tienes que haber aceptado que eres calvo y feliz; olvida los carísimos producto para mantener o aumentar tu cabello, son como el coche, todo gasto.

Ellas los adoran

No es consuelo de tontos, es ciencia. La calvicie está provocada por un exceso de testosterona, que se produce principalmente en los testículos. Está claro, cuando ellas ven un calvo, ven fecundación (con todos mis respetos) y potencia sexual y eso, si lo sabes aprovechar, es oro.

Son nuestros héroes

Si eres del Real Madrid, me negarás que no tienes a Zidane en los altares y aún rezas para que vuelva a la mediapunta del Bernabeu. En el banquillo encontramos al mejor representante de los calvos en el Barça, no hay mejor ejemplo progresión hacia el cráneo despejado que la que hemos visto en la cabeza de Pep Guardiola desde que dirige a los azulgranas.

Puedes comer lo que quieras

Un reciente estudio decía que si comes gambas, ciruelas, guisantes, hígado de ternera o sardinas puedes paralizar la caída del cabello. Estos alimentos son ricos en vitamina B12, el hierro o el zinc. Si eres calvo también puedes tomarlo, mal no te van a hacer.

Triunfadores

No sé si será por todo lo que os hemos contado o por su talento, pero los calvos son estrellas en sus respectivos campos. Bruce Willis, Vin Diesel o Jason Statham se inflan a pegar tortas en el cine. Pitbull, Moby, Fito o Michael Stipe (de R.E.M.) llevan su calva por los escenarios de todo el mundo (que aprenda Justin Bieber). Jude Law es uno de los it-boys por excelencia, uno de los hombres más elegantes del mundo. Camps o Anasagasti tienen menos problemas con su alopecia que Berlusconi, que no ha quedado muy allá con los implantes. Y mirar a Antonio Lobato, que no se despeina ni con los acelerones de Fernando Alonso. Y tantos más...