32 películas llevaba Clint Eastwood como realizador y ni un musical en su nómina hasta que conoció la historia de Frankie Valli y The Four Seasons, una banda que ya se ha hecho con todos los premios de Broadway. 'Jersey Boys' llega a los cine y con ellos las contagiosas armonías 'doo-wop' que te harán bailar sobre la butaca.
Más de 17,5 millones de espectadores en todo el mundo ya conocen a los 'Jersey Boys'... al menos a los del teatro. Ahora toca ir al cine para descubrir a estos cuatro muchachos italoamericanos que saltaron a los primeros puestos de las listas de éxitos americanos con canciones como 'Sherry', 'Big girls don't cry', 'Walk like a man' o 'Rag doll' y sobre todo 'Can't take my eyes off you' que, curiosamente, en España, llevaría a las listas de éxitos a finales de los sesenta el crooner británico Matt Monro.
'Jersey Boys' no cuenta una historia diferente a la de otros musicales sobre grupos que un día fueron estrellas: nos cuentan sus difíciles comienzos y sus más complejos finales, auspiciados casi siempre por la ambición desmedida de uno de los miembros del grupo o de su mánager. El aliciente de este musical está detrás de las cámaras, en la alargada figura de Clint Eastwood.
Ha tenido que llegar Bob Gaudio, Tommy DeVito, Nick Massi y Frankie Valli -los cuatro miembros de The Four Season- para que Eastwood se ponga al frente de un musical y lo hace con el elenco original de la producción de Broadway: John Lloyd Young, Erich Bergen, Vincent Piazza y Michael Lomenda, casi todos ellos debutantes en el cine.
Rupturas, problemas sentimentales, ?malas compañías?, dinero fácil, divisiones en el grupo, deudas y decadencia. van construyendo su perfil biográfico y profesional de los cuatro sazonadas con melodías contagiosas, armonías en estilo doo-wop y el inconfundible ?falsetto? de Frankie Valli.