La diseñadora Agatha Ruiz de la Prada ha sido la encargada de poner punto y final a la tercera jornada de la Mercedes-Benz Fashion Week. Agatha no ha defraudado y la perfomance que ha acompañado al desfile se ha convertido en toda una fiesta. Al ritmo de "Locomia" la diseñadora daba el pistoletazo de salida a su nueva colección Otoño/Invierno "Color Prints".
El fucsia ha sido el gran protagonista de esta nueva línea que ahonda en los estampados y sobretodo en buscar la comodidad de la mujer. Agatha ha desterrado la famosa frase "para lucir hay que sufrir" y ha abogado por conseguir que la unión belleza y comodidad sean posibles. "Color Print" enfrenta las líneas rectas con las curvas y círculos, leggins ceñidos que se contrarresta con grandes abrigos oversize, evasés y capas juegan con todos los tamaños y largos posibles de prendas, todo esto trata de conseguir que el arte de vestir sea un verdadero juego .
La paleta de colores es muy amplia y los colores vivos como el azul eléctrico, el verde y el naranja se mezclan sin miedo. Los estampados juegan también un papel muy importante en esta nueva colección y se añaden a los típicos corazones de Agatha otros como las nubes, estrellas y arcoíris. Unos diseños para una mujer contemporánea que busca reafirmarse en el mundo.
La ambientación del desfile ha conseguido que todos los asistentes se introduzcan completamente en el mundo de Agatha y participen de él. En el front row no ha faltado su marido, el periodista Pedro J. Ramirez acompañado de la política Cristina Cifuentes. Y para finalizar, Agatha Ruiz de la Prada ha puesto el broche de oro con la canción de Mecano "No Controles", una metáfora de su nueva colección en la que los valores naturales de su firma se ratifican.