El 10 de abril de 1912, el Titanic inició su viaje inaugural partiendo desde Southampton (Inglaterra) con destino a Cherburgo, Queenstown y finalmente a Nueva York. Cuatro días más tarde, a las 23:40 del 14 de abril, el buque chocó con un iceberg al sur de las costas de Terranova, y se hundió a las 2:20 de la mañana del 15 de abril. El siniestro se saldó con la muerte de 1.517 personas, el peor desastre marítimo en tiempo de paz en esa época. Hoy el Titanic es una leyenda muy lucrativa que sigue zarpando a diferentes niveles.
Hasta 14 películas, un documental, exposiciones permanentes, homenajes, libros, su orquesta, misterios sin resolver... el mito del Titanic sigue, cien años después de su partida de Southampton tan vivo como el primer día. Y es indudable que su viaje no ha terminado mientras el interés por este crucero trasatlántico, que no era el más grande de su época como siempre se ha dicho (compartía el honor con el Olympic) ni el más veloz (era el Mauretania), siga recaudando millones de euros en todo el mundo.
Para volver a asaltar la taquilla se estrena de nuevo 'Titanic 3D', en la que James Cameron ha puesto en marcha toda la maquinaria de las últimas tecnologías digitales para hacer aún más espectacular el hundimiento más conocido del cine, y esa historia de amor que haya por 1997 vivían Jack Dawson y Rose DeWitt Bukater, encarnados para la eternidad por Leonardo DiCaprio y Kate Winslet. Una cuidada producción para regocijo de los amantes del filme, ganador de 11 Oscars y 4 Globos de Oro, y las nuevas generaciones.
Si tu nivel de entusiasmo por el Titanic y su travesía es elevado, lo mejor es que vivas el viaje en primera persona. Los cruceros hacía América siguen zarpando cada semana de Southampton a bordo del RMS Mary Queen 2, de la compañía Cunard Line. Éste sí, es el transatlántico más grande, más lujoso y caro construido en la historia marítima. 1.310 camarotes componen este navío construido en Francia que cuenta, además, con 5 piscinas diferentes, una colección de arte valorada en 5 millones de dólares, un museo sobre la historia marina, discotecas, teatro para musicales, casino, auditorio, servicio de mayordomos, niñeras, gimnasio, biblioteca... un Titanic de nuestros días que lleva navegando desde enero de 2004 si miedo a las supersticiones.
Para conocer mejor la historia oculta de la embarcación te proponemos un viaje diferente, a Belfast (Irlanda del Norte), al Museo del Titanic. Aunque más que un museo, podemos hablar de este centro como una experiencia multisensorial que sobrecoge al visitante y lo transporta por el océano Atlántico y a través del tiempo por los años 20. Elementos interactivos como pantallas táctiles o la realidad aumentada permite conocer más acerca de la tragedia y sus pasajeros. La fachada de este moderno museo tiene la forma de cuatro proas, todas de la misma altura que tenía el auténtico Titanic desde la quilla hasta la cubierta.
Un iceberg acabó con la joya de la corona de la marina británica pero puede servir para que tú descubras una forma diferente de tomarte una copa. Estamos hablando del IceBarcelona, el primer bar de hielo en la playa del mundo, una interesante propuesta que abrió sus puertas en 2007 y que se ha convertido en una de las principales atracciones de la Ciudad Condal. Un sala completamente hecha de hielo (paredes, muebles, barra) en la que poder tomarte algo a 5 grados bajo cero. La entrada cuesta 15 euros e incluye una consumición y ropa de abrigo. Cuando la tiritona sea ya inaguantable, puedes dejar que el sol te caliente en su terraza con vistas al mar.
