
Parece que el divorcio entre Russel Brand y Katy Perry se va a hacer efectivo en poco tiempo. El cómico está haciendo todo lo que está en su mano para que la división de los bienes que compartía con la cantante se produzca en el menor tiempo posible.
Russel Brand ha renunciado a la casa en la que convivía con la cantante en Los Angeles. Ha firmado un documento en el que cede todos los derechos a esta residencia valorada en 6.5 millones de dólares, casi 5 millones de euros, a Katy Perry.
TMZ informaba que la pareja no firmó un contrato de separación de bienes y, por tanto, tienen que repartirse las rentas que ganaron y los bienes que compartieron. Por lo visto, Russel, además de renunciar al dinero de la cantante, tampoco quiere la casa donde convivió con ella.
Fuentes cercanas a TMZ informan que todo forma parte de un acuerdo para cortar de una vez todos lazos que unían a la pareja. Con este gesto, Russel demuestra sus buenas intenciones, aunque parece que su paciencia se está acabando y quiere acabar con este proceso lo antes posible.