
Tras varios años de tiras y aflojas, parece que la cuerda se ha roto definitivamente, y es que el piloto de Fórmula1 Lewis Hamilton y su novia Nicole Scherzinger, perteneciente al grupo americano Pussycat Dolls, han dado por definitivo su noviazgo.
Al parecer los motivos han sido porque el piloto tras 7 incansables años de relación no quería casarse con la cantante, ni establecer un lugar para vivir juntos, ya que Hamilton reside en Mónaco y ella no Los Ángeles, según ha publicado el diario británico 'The Sun'.
La pareja se habría dado cuenta de que la relación no podía avanzar más ya que Nicole se encuentra más cerca que nunca de su ex-chico, ya que está inmersa en el exitoso musical 'Cats' en Londres.
Según 'The Sun', ella se encuentra desolada y perdida respecto a su futuro.