No se les ha visto mucho juntos estas vacaciones en Mallorca. Lo que venía siendo una sospecha ha quedado en evidencia este verano: las responsabilidades de la Corona pesan cada vez más sobre la princesa plebeya, que abiertamente rechaza Mallorca como lugar de vacaciones.

Según publica el diario El Mundo, los herederos del trono español tuvieron algunas discusiones previas al verano porque Letizia rechazaba el escaparate mallorquín, que para ella no es sino trabajo.

En cambio, el Príncipe la convenció con el pretexto de la tradición y el impulso del turismo en las islas Baleares. En cambio, él sí disfruta en la isla.

Vacaciones a medias

El resultado han sido unas vacaciones en las que Letizia ha huido de las cámaras y solo ha posado en la clásica estampa familiar cuando ya empezaba a ser tema de conversación su ausencia.

Permaneció el tiempo imprescindible en la isla para volver a Madrid, donde se reunió con amigas.  Al príncipe Felipe, por otra parte, se le ha visto en presencia de amigos en locales de moda de Palma.

Sin embargo, El Mundo asegura, citando a fuentes del entorno de los Príncipes, que no hay crisis entre ellos cuando se cumplen ya nueve años de matrimonio.

El heredero tendrá que asistir esta semana a la toma de posesión del nuevo presidente de Paraguay, y tras su viaje, la pareja ha reservado tiempo para unas vacaciones privadas, que ansía la princesa Letizia.