Juntar bebida y lectura está de moda en la capital, en donde abundan los locales dedicados a ambos placeres. Es el caso de La Fugitiva, una librería-café de Lavapiés que además de ofrecer los servicios de un bar, te permite comprar libros de todo tipo.
La Calle Santa Isabel acoge este peculiar local, adornado completamente con libros, que ocupan estanterías situadas en todos los ángulos y también un expositor central.
Todo tipo de temáticas son las abarcadas por los volúmenes que copan el espacio del café, confiriéndole un peculiar aspecto con sus vivos colores y la variedad de sus tamaños.
Con un ambiente de calma y silencio, esta cafetería es perfecta para relajarse y escapar del bullicio madrileño, mientras aderezas un delicioso café con las letras de las historias más interesantes.
