La primera dama de Estados Unidos demuestra que es una mujer normal y que incluso en su matrimonio con el presidente de EE.UU hay a veces dudas. Gracias a ABC.es podemos saber que Michelle, como en casi todas las parejas, sufre momentos de inestabilidad con su marido.
Es poco común que la esposa de un presidente abra de esta forma el corazón, pero una acción así muestra su lado más humano. En este caso, las declaraciones han sido para la revista italiana Chi en las que se ha confesado con esta declaración: "A veces siento que Obama no me quiere". ¿Crisis entre la pareja modélica? Para nada, Michelle a continuación dice: "Solo con hablar con él ya me siento segura y me doy cuenta de que, en realidad, me adora".
La primera dama tiene sus momentos débiles, pero esos instantes duran poco, ya que la feliz familia que muestran al mundo en sus apariciones en público también lo es en la vida privada. Michelle también cuenta en la entrevista su día a día en la Casa Blanca, en el que hablan de sus problemas, Obama tiene cariñosos gestos con ella cuando se va a dormir y la arropa y hacen juntos cosas con sus hijas, como sacar al perro.
Michelle Obama habla además sobre su secreto para estar tan felices, y es que no se toman las cosas demasiado en serio. "Por ejemplo, cuando salimos a hacer deporte juntos estamos todo el tiempo riéndonos de nosotros mismos". También cuenta que su marido es fan de Beyoncé y que adora la música y que no tiene ningún reparo en cantar por toda la casa. A pesar de ello, Michelle no tiene celos, ya que ella tiene a su propio cantante en la familia y un marido que como ella misma confiesa, la adora.
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