La baronesa Thyssen ha celebrado este lunes su 67 cumpleaños, sin embargo, quizás éste sea uno de los más tristes, pues sus relaciones con su hijo Borja no terminan de de mejorar.
Según informa vanitatis.com, hace algunos días podíamos ver a la baronesa, descansando en su residencia de la ciudad de Lugano, días antes de su cumpleaños. Allí, en su espectacular mansión, valorada en más de 20 millones de euros, Tita pudo haber reflexionado en torno a todo lo acontecido en los últimos años. Y es que Carmen Cervera desea que pronto se produzca un acercamiento con su hijo, sin embargo, parece ser éste el que se niega a tenerlo.
Tita, que en estos momentos intenta rodearse de amigos, regresó a Barcelona, tras sus días de reflexión y descanso en Lugano para disfrutar del partido que se disputaron Fernando Verdasco y el belga Steve Darcis en el Torneo Conde Godó.
Lo cierto es que han sido los continuos problemas en torno a la figura de Blanca Cuesta lo que ha debilitado la relación entre madre e hijo y a pesar de que Tita ahora está dispuesta a llegar a un acercamiento, la relación hace años que es inexistente... ¿Conseguirán acercar posturas pronto o la Baronesa pasará más cumpleaños lejos de su familia?
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