
Gwyneth Paltrow siempre se ha mostrado contraria a someterse a procedimientos quirúrgicos que impliquen la silicona o el botox. Sin embargo, sí estaría dispuesta a pasar por quirófano si se trata de corregir los efectos que la lactancia materna han provocado en ella.
La actriz, que tiene dos hijos - Apple de siete años y Moses de cinco- con su marido, el vocalista de Coldplay, Chris Martin, considera el botox como "pura vanidad". Pero, por otro lado, sí consideraría operarse para dejar su pecho en su "estado original".
En una entrevista a la edición alemana de la revista 'OK!', Gwyneth comenta: "Antes no me importaba. Y sigo negándome a utilizar silicona, botox o cualquier otra trampa que no son más que pura vanidad".
Sí se operaría el pecho
Sin embargo, admite que sí se haría arreglos relacionados con las consecuencias de la maternidad. "Pero una corrección de pecho después de la lactancia, ¿Por qué no?. En realidad es restaurar algo a su estado original que ya no está ahí", señaló la actriz.
Gwyneth nunca ha ocultado que si se mantiene así de espléndida a sus 38 años y después de haber dado a luz dos veces, es porque hace ejercicio a diario.
"En algún momento perdí mi cintura por el intenso yoga y me convertí casi en una caja. Pero con estiramientos y pilates me he vuelto a poner en forma", comenta Gwyneth.
La actriz, que entre sus nuevos compromisos musicales y sus tareas como madre y esposa ha pasado a tener menos tiempo que nunca, confiesa que ya no puede hacer sesiones de yoga de 60 minutos. Pero, en cualquier caso, dice reservar cinco minutos diarios para meditar.
No sabemos si será ese el truco de belleza que la mantiene tan estupenda, pero tendremos que probarlo por si acaso.