Es tiempo de luz, subida de las temperaturas, terrazas... La llegada de la primavera es un momento ideal para revolucionar nuestro cuerpo y ponernos en forma de la forma más divertida y... refrescante.
Estos son los principales beneficios de practicar deporte en el agua, según GO fit:
1. Reduce el impacto. Una de las claves del éxito de los deportes de agua es la hipogravidez (escasez de gravedad), que disminuye el impacto del cuerpo con el suelo y, por tanto, la tensión sobre las articulaciones. Por esto, se pueden realizar ejercicios de mayor duración y con más frecuencia y tienen un gran efecto positivo psicológico.
2. Apto para todos los públicos: puede ser practicado por personas de todas las edades y de todos los niveles de preparación física. Es sobre todo recomendable para aquellos que acaban de finalizar un proceso de rehabilitación, para embarazadas y personas mayores.
3. Previene las lesiones: la práctica de ejercicio en el agua, ayuda a aliviar dolores de espalda, calambres, estrés y tensión muscular. Además, también resulta eficaz en la recuperación de lesiones musculares o articulares.
4. Mejora el estado de ánimo: al realizarlo en un medio que no produce impacto, se convierte en un activador del buen humor. Aporta, además, una sensación lúdica, cargada de vitalidad y energía positiva.
5. Relaja: al ser una actividad en el medio acuático, permite relajarse con mayor facilidad. Gracias a la flotabilidad, no nos sentimos tan pesados, algo que hace que sintamos seguridad y que logremos movernos con mayor libertad. Así conseguimos mejorar las capacidades respiratorias, la tonificación muscular, la mejora de la flexibilidad y de la circulación.