Las hipotecas palpitan de nuevo: Las ofertas más agresivas
El mercado de las hipotecas vuelve a dar leves señales de vida. La irrupción de nuevos productos demuestra que la maquinaria comercial de las entidades no ha dejado de funcionar estos meses; sin embargo, conviene leer la letra pequeña de estas ofertas.
De forma tímida pero segura, las entidades vuelven a colgar de los cristales de sus oficinas carteles promocionales... de hipotecas. Una de las primeras de esta nueva hornada, y de las más agresivas, ha sido la Rompedora de Deutsche Bank, que ha llenado las sucursales con la llamativa oferta del 0,27 por ciento. Pero no han sido los únicos. Más recientemente Ibercaja, en estos momentos Banco Pastor y hace unas semanas BBVA también apuntan sus objetivos comerciales al producto hipotecario.
La entidad aragonesa ha lanzado una propuesta, cuanto menos original, aunque hay que leer con atención la letra pequeña. Su nueva hipoteca 400 tiene la particularidad de que incluye un tipo fijo los dos primeros años que genera una cuota de 400 euros mensuales y que, como es natural, varía en función de la cuantía que se solicita para que cuadre con esa mensualidad exacta. Así, por ejemplo, y para un préstamo de 200.000 euros a 30 años, se aplicaría un tipo del 2,4 por ciento. A partir del tercer año, el dinero se cobra a un tipo mínimo de euribor más 0,75 por ciento en función de bonificaciones que se consiguen con la contratación de otros productos (si no, el precio se eleva a un 1,2 por ciento). Por ejemplo: domiciliar tres recibos, realizar compras con tarjetas Ibercaja, contratar un seguro de vida...
Estrategia de Deutsche
Otra novedad que ha lanzado Deutsche ha consistido en acompañar su euribor al 0,27 por ciento con un ingreso de 1.000 euros para todos los que cambien su hipoteca a esta entidad, una propuesta similar a la de BBVA que regala 200 euros cada mes por traspasar la hipoteca.
A cambio de esta compensación en metálico, Deutsche exige la contratación de una cuenta nómina, a la que se ingrese un mínimo de 2.500 euros (de uno o los dos titulares), además de una aportación mínima anual a un plan de pensiones o fondos de inversión. De nuevo, una letra pequeña a la que prestar atención.
Finalmente, Banco Pastor anuncia como novedad un préstamo "sin suelo", como forma de contrarrestar a una serie de hipotecas en las que, por mucho que baje el euribor, no se aplica al cliente la bajada del precio más allá de la fijada de antemano, que suele ser de un 2 ó 3 por ciento.