Vivienda - Inmobiliario
Iris Costablanca compra un edificio de oficinas vacío en Alicante para transformarlo en hotel
elEconomista.es
Valencia,
La fiebre hotelera en el centro de las grandes capitales valencianas continúan y para ello los inversores incluso están dispuesto a convertir inmuebles de oficinas en nuevos establecimientos de alojamiento. La firma local Iris Costablanca Inversiones ha adquirido un inmueble de oficinas en pleno centro de Alicante que reconvertirá en un hotel gestionado por la firma Be Alicante.
El edificio adquirido albergó las oficinas de la Fundación de la Oficina Valenciana para la Sociedad de la Información (OVSI) de la Generalitat Valenciana y llevaba vacío desde hace tiempo, pese a su céntrica ubicación, en la calle Bazán 57, muy cerca de Alfonso el Sabio, una de las grandes vías de la ciudad.
Iris Costablanca Inversiones, que gestiona el alquiler de varios activos inmobiliarios, amplía así su presencia en el sector turístico. Su intención es reconvertir el inmueble, con una superficie total construida de 1.139 metros cuadrados distribuidos en planta baja y cinco alturas, en un hotel boutique con 28 habitaciones.
El futuro alojamiento será gestionado por la cadena Be Alicante, que ya cuenta con establecimiento en la ciudad además de cuatro edificios de apartamentos turísticos en varios puntos de la capital de la Costa Blanca. La cadena también tiene presencia en Cataluña.
Atractivo inversor
La operación de compra a un family office valenciano ha contado con el asesoramiento de la firma inmobiliaria Colliers, que destaca que Alicante "se ha consolidado como uno de los destinos turísticos más atractivos de España" tras su fuerte crecimiento estos años.
Para la consultora, "la combinación de una elevada ocupación, el incremento de las tarifas y la limitada disponibilidad de hoteles, en contraste con la proliferación de apartamentos turísticos, ha impulsado el interés inversor en la conversión de activos inmobiliarios en establecimientos hoteleros".
Según recoge durante la temporada de verano de 2024, la ocupación hotelera alcanzó el 88%, mientras que el ADR (ingresos por habitación) se situó en 133 euros, reflejando la fortaleza del mercado.