El reto más difícil para Michael Jordan: ¿por qué nadie compra su mansión?
- Empezó vendiéndola por 29 millones y ahora vale prácticamente la mitad
- Michael Jordan la adquirió en 1991 y fue finalmente construida en 1995
- En 2013 la puso a la venta y desde entonces sigue sin encontrar comprador
elEconomista.es
El mejor jugador de baloncesto de todos los tiempos nunca ha tenido problemas en superar cualquier obstáculo que se le ponga por delante. Sin embargo, desde hace más de diez años que lleva enfrentándose a un rival que siempre le termina taponando cada vez que quiere entrar a canasta. Se trata de su lujosa mansión, ubicada en Highland Park, al norte de Chicago. Sin duda, el partido más largo para Michael Jordan.
Fue el año 2012 cuando Michael Jordan decidió poner a la venta su gran mansión de Chicago, que se ubica en una parcela de más de tres hectáreas, a orillas del lago Michigan. Fue adquirida en 1991 y construida en 1995, el mismo año en el que el mítico exjugador volvió a las canchas tras estar un año y medio retirado de ellas para así probar suerte en el béisbol.
La mansión es puro lujo, y cuenta con espacio para nueve habitaciones, 15 baños, un gimnasio de primer nivel, una cancha de baloncesto (pieza central de la vivienda) y otra de tenis, una piscina infinita y un minigolf. También tiene una sala exclusiva para fumadores donde organizaba partidas de póker.
Además de las comodidades antes mencionadas, cuenta con un garaje con espacio para 15 coches, una biblioteca con pantalla desplegable, un salón de fiestas, un bar, un casino, dos teatros, una sala de cine y un lago para pescar.
Una de las peculiaridades de esta mansión es que el portón lleva el mítico número 23, el histórico dorsal con el que Michael Jordan ganó seis anillos de la NBA, entre 1991 y 1998. Dentro de esta decoración, las puertas, por ejemplo, formaron parte de la mansión Playboy original de Chicago antes de comprarlas Jordan.
Caída en el precio
La mansión fue puesta a la venta en 2013. Por aquel entonces, Michael Jordan intentó subastarla sin éxito y, desde entonces, ha bajado varias veces su precio. En un comienzo, la propiedad se puso en venta en 29 millones de dólares, después bajó a 21 millones, más tarde a 16 millones hasta llegar a los 14,8 millones que está publicada hoy en día.
¿Por qué no se vende?
En mayo de 2020, en declaraciones a Marketwatch, Adam Rosenfeld, de la empresa inmobiliario de lujo Mercer Vine, explicó que Jordan tiene serios problemas para vender la casa por los espacios y objetos personalizados que hay en ella. "Cuando tienes una propiedad tan específica y tan customizada, la venta se convierte en una batalla cuesta arriba", opinó el experto.
Katherine Malkin, la actual agente de cotización de la propiedad de Michael Jordan, destacó que "es una propiedad hermosa, y creo que nadie entiende lo hermosa que es porque no hacemos una jornada de puertas abiertas, porque existe una preocupación por la privacidad", destacó Malkin. "No es hasta que las personas están adentro que realmente lo aprecian. Y no todos califican económicamente (para ver la casa)".
Por otro lado, la aparición del documental The Last Dance (de 2020 en Netflix) agitó la coctelera y provocó interés en verla. "No estoy seguro si es por los programas de televisión que hicieron o si es porque la gente tiene interés en verlo de una manera un poco diferente, pero de repente es cierto que hay un poco de interés ", le dijo Malkin al Tribune.