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¿Pierdes las llaves a menudo? No es culpa tuya y la ciencia lo explica

  • Tener lapsos de memoria es más común de lo que parece
  • Muchas personas admiten pasar hasta 15 minutos buscando las llaves
  • Psicólogos explican que no es un problema de demencia o memoria
Llaves de casa. Imagen: Pixabay

EcoDiario.es

Has puesto las llaves en algún lugar y parecen no estar en ninguna parte que recuerdes. Casi 20 minutos dando vueltas por casa buscando las llaves, cuando deberían estar en el canasto que hay cerca de la puerta. Miras en el bolso, la mesita de noche, en los bolsillos de pantalones y chaquetas: finalmente están bajo el correo que recogiste ayer.

Perder las llaves o cualquier otra cosa es cuanto menos irritante. Es frustrante que se nos olviden las cosas cuando vamos mal de tiempo y tenemos que salir corriendo de casa. Según una encuesta en la que participaron más de 3.000 colaboradores, un tercio de los encuestados dijeron que emplean un promedio de 15 minutos diarios buscando las llaves o cualquier otro objeto.

El olvido de objetos cotidianos no es ningún tipo de signo de enfermedad seria como el alzheimer o la demencia. Y aunque esto pueda empeorar con la edad, algunos psicólogos afirman que los lapsos de memoria son lo más común para cualquier tipo de edad. El estrés, la fatiga y la multitarea pueden ser algunos de los culpables que llevan a cometer tales errores.

Para el famoso doctor Daniel Lawrence Schacter, psicólogo en la universidad de Harvard, se trata de "la ruptura en el interfaz de atención y la memoria" según explicó en el diario de The Wall Street Journal". Para explicar la "ruptura de interfaz" expone el caso de cuando una persona llega a casa hambrienta deposita las llaves en cualquier sitio y se va a comer. Es más tarde cuando vuelven a hacer falta las llaves y no sabes dónde las has dejado, porque tu mente estaba centrada en comer.

El hecho de hacer físicamente y mentalmente todos los pasos para buscar los objetos desaparecidos puede ayudar. Cuanto más se ejercite el cerebro para recuperar ese momento de estado de ánimo, se establecerán conexiones de la memoria original y tendremos más éxito.

Algunos métodos para no olvidarse de los objetos personales

La mejor forma de recordar dónde poner algo es lo más obvio: depositar los objetos en un lugar que sea regular para él y en un sitio donde tenga sentido. Si son gafas de leer, en la mesita o en el escritorio del despacho y, en el caso de las llaves, dejarlas en un cuenco cerca de la puerta o en un bolsillo en concreto del bolso.

Mark McDaniel, profesor en la Universidad de Washington, aconseja una técnica muy eficaz. El método consiste en pensar y hablar en voz alta. Por ejemplo, si tienes que recordar comprar yogures en el supermercado, imaginarse los productos de las neveras y su ubicación. De esta manera cuando llegas a la tienda, los pasillos y la cantidad de neveras te ayudarán a recordarlo.