La Senda Termal de La Rioja y sus alicientes turísticos
Tomando la localidad de Ardenillo como inicio de la ruta, podemos diseñar un atractivo fin de semana lleno de lúdicas actividades... para todos los gustos y para todas las edades.
Para explorar el sureste de La Rioja podemos seguir las directrices marcadas por la denominada Senda Termal, una iniciativa creada para resaltar los recursos turísticos de la zona comprendida entre siete municipios situados en plena Reserva de la Biosfera.
La localidad de Arnedillo, situada entre montañas y delimitada por el río Cidacos, que se encuentra a 62 km. de Logroño y a 27 km. de Calahorra, se puede considerar como la capital termal de La Rioja. "Es un paraíso termal con solera" en palabras de Pedro Montalvo, su alcalde, y que hago también mías después de la visita que hice con motivo del recientemente celebrado X Encuentro de Villas Termales. A destacar que a los pies de las magníficas instalaciones del balneario también podemos bañarnos al aire libre en las pozas públicas junto al río Cidacos, con el agua a una temperatura de 52º C; y donde incluso existe, para escándalo de algunos y regocijo de otros, una poza nudista donde curarnos de la ansiedad y el estrés, dos de las características sanadoras de las aguas termales del manantial.
Otros dos balnearios: el de Grávalos y La Albotea, se incorporarán a la Senda Termal una vez concluidas las obras de remodelación y diseño.
Enciso. Yacimiento Virgen del Campo.
A 12 km. de Arnedillo se encuentra Enciso. Este municipio ha sido el lugar elegido para montar -en una antigua fábrica de zapatos- el parque temático de los dinosaurios, al que han llamado Parque de Paleoaventuras 'El Barranco Perdido', donde además de aleccionarnos sobre los dinosaurios, los más pequeños tendrán la oportunidad de divertirse en sus tirolinas. Un sendero, que parte del propio parque, nos lleva a descubrir las huellas fosilizadas (icnitas) que persisten entre los estratos, por un instructivo recorrido donde dos dinosaurios ('de mentira') entablan una lucha. Ricardo Ochoa, nuestro guía, nos recuerda cómo su abuela le llevaba siendo muy niño por aquellos parajes convirtiéndose en su primera instrucción sobre el tema: "Esto son pisadas de gallinas gigantes que vivían en otros tiempos"; Ricardo cierra el bucle histórico con una frase del famoso paleontólogo Jack Horner. "¿Quién nos dice que cuando te comes un pollo, no te estás comiendo un dinosaurio?".
A pocos kilómetros percibimos la silueta de un Tiranosaurio en lo alto de una colina, que con sus 14 metros de altura, a buen seguro se convertirá en un recuerdo imborrable para los más pequeños. Es el Parque de Valdecevillo, quizá el más famoso por la cantidad de huellas de interés y la riqueza histórica de los mismos.
Pero para saber más -¡o todo lo que queramos saber!- sobre aquellos fantásticos animales que poblaron la Tierra en el Jurásico, tenemos que escuchar a Pilar García, la voz autorizada y erudita del Centro de Interpretación Paleontológica de Igea, una visita ineludible en nuestro viaje.
Sobre la hora de la comida no es necesario dar muchas coordenadas, estamos en la Rioja y se come muy bien en toda la comarca, pero quizá no haya probado nunca las chuletas de chamarillo, el cordero de raza autóctona, ahora es la oportunidad. Podemos probarlas (por ejemplo) en La Rubia, el restaurante que regentan con devoción y simpatía Carlos y Ana en el pueblo de Cervera de Alhama, donde también podemos pasar la noche en su recién inaugurado hotel, y podemos admirar el curioso Museo de la Alpargata... para seguir culturizándonos.
Museo de la Alpargata, en Cervera.
Al día siguiente nada mejor que concertar la visita para visitar uno de los poblados celtibéricos mejor conservados de la zona y al que han llamado con el sugestivo nombre de Contrebia Leucade, sito en la vecina localidad de Aguilar del río Alhama, y que cuenta también con su propio Centro de Interpretación.
En el camino de vuelta, desde la carretera y al pasar de nuevo por Igea, destaca la mole cúbica, coronada por una gallarda cúpula, del Palacio del Marqués de Casa Torre, la más importante construcción civil de La Rioja que data del siglo XVIII y fue erigida por un rico indiano que llegó a ser Virrey del Perú... y que ahora imaginamos convertido en hotel de muchas estrellas.
Igea.
Claro que para ver muchas estrellas (de verdad) tenemos que reservar una noche para pasarla en el pueblo de Cornago, desde cuyo castillo se puede admirar uno de los cielos más limpios de contaminación lumínica, como así consta en el informe de la Reserva de la Biosfera, en el que cita a La Rioja como Primer Destino Turístico de España para contemplar las estrellas... Si ya lo dijo el sabio Anaxágoras: "En todo caso... El hombre, de haber nacido para algo, es para contemplar las estrellas".
Para más información:
Senda Termal: www.sendatermal.com
SEPINUM (Turismo, Patrimonio y Desarrollo Rural): www.sepinum.com
Balneario de Arnedillo: www.balnearioarnedillo.com
Centro de Interpretación Paleontológica de La Rioja, Igea: centroigea@hotmail.com
Museo de la Alpargata: www.cerveradelrioalhama.org