Comunidad Valenciana

El expresidente de la CAM se compara con Bankia para defender su gestión

  • Modesto Crespo no justifica su sueldo con carácter retroactivo
  • Descarga las responsabilidades en directivos, auditores y consejeros


El expresidente de Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) Modesto Crespo aprovechó este lunes la crisis de Bankia para defender su gestión e insinuar que la intervención de la entidad alicantina por parte del Banco de España respondió a criterios políticos.

Crespo compareció ante la comisión de investigación sobre la CAM constituida en las Cortes valencianas, ante la que se preguntó en voz alta "por qué en los casos de Unnim, Caixa Galicia y Caixa Catalunya se decide nacionalizar y comprar por un euro y no intervenir", e instó a preguntar al Banco de España.

"No quiero hablar de las cantidades mucho mayores que ha recibido alguna otra entidad que hoy mismo anda con muchísimos problemas", añadió en referencia a Bankia.

Crespo no reconoció ninguna responsabilidad en la crisis de la CAM. Las mayores dificultades las tuvo para justificar el sueldo de 300.000 euros anuales que se asignó a través de una participada con efectos retroactivos a seis meses antes de su nombramiento.

Afirmó que lo hizo así porque ya había estado trabajando para la empresa desde entonces, pero el diputado socialista Ángel Luna le rebatió mostrándole que en esos seis meses la empresa tenía un administrador único que no cobraba por ese trabajo.

Luna también desmintió su afirmación de que él no fijaba los sueldos de los directivos, ya que tenía esa competencia delegada. Crespo descargó toda la responsabilidad de los sueldos irregulares de la cúpula directiva en la Comisión de Retribuciones y no respondió cuando Luna le demostró que era él quien tenía esa atribución y que vulneró las normas de la propia entidad para favorecer a los ejecutivos.

Ruptura en el Banco de España

Sobre las negociaciones de los SIP, reveló que el que negociaba con Cajamurcia lo rompió el presidente de esta entidad, Carlos Egea, en una reunión entre ambos en la sede del Banco de España.

Y respecto a la ruptura con Banco Base en marzo de 2011, afirmó que no sabía el motivo, aunque reconoció que el presidente de Cajastur, Manuel Menéndez, conoció tres meses antes un duro requerimiento del Banco de España a la CAM recibido días antes de la creación del SIP.

Crespo admitió tener una "magnífica" relación con Francisco Camps y su entonces consejero de Economía, Gerardo Camps, anterior a su llegada a la CAM en 2007, pero se negó a explicar si influyeron en su nombramiento, del que hizo corresponsable al entonces líder socialista Jorge Alarte. "Nunca recibí presiones", añadió.

Preguntado por la afirmación de los responsables de KPMG, que comparecieron por la mañana, de que fueron engañados, el expresidente afirmó que los auditores no trataban con él, sino con los directivos, y que los informes que recibió el consejo estaban limpios. "Si no hacían bien su trabajo y se dejaban engañar, no es mi responsabilidad, sino de ellos, que cobraban sus buenos dineritos", zanjó.