Turismo y Viajes

Ciudad Real acogerá el I Congreso Nacional de Turismo Cinegético



    La actividad cinegética tiene una gran importancia en Castilla-La Mancha, donde se estima que mueve alrededor de 600 millones de euros al año. Con el objetivo de potenciar la caza y el negocio que genera en torno a sí, Ciudad Real acogerá esta semana, el viernes 26 y el sábado 27 de septiembre, el I Congreso Nacional de Turismo Cinegético.

    Hace unos días, la consejera de Empleo y Economía del Gobierno de Castilla-La Mancha, Carmen Casero, afirmaba en la presentación oficial del Congreso que la presidenta de la Comunidad Autónoma, Mª Dolores de Cospedal "ha cumplido su compromiso" con el turismo cinegético al auspiciar este encuentro.

    Según los datos de la Administración, la actividad cinegética genera más de 6.500 empleos fijos en la región en puestos directos de trabajo, crianza y aprovechamiento de especies cazables, con unos jornales anuales superiores a 1,6 millones de euros. Más allá de su carácter deportivo o de ocio, la caza genera actividad empresarial y tiene una enorme influencia en la socioeconomía castellanomanchega.

    La superficie destinada a la actividad cinegética en Castilla-La Mancha abarca más de 7.000.000 de hectáreas, de las que 4.010.097 están destinadas al aprovechamiento de caza menor y 3.019.895 hectáreas al de caza mayor. En cuanto al número de piezas, en Castilla-La Mancha se cobran anualmente más de 93.000 piezas de caza mayor y más de 5.800.000 piezas de menor. Entre las especies de caza mayor, destacan el venado y el jabalí, y entre las especies de caza menor la principal es la perdiz, con más de 1.400.000 piezas, seguida por el conejo y la liebre y, en menor medida, la paloma torcaz.

    Estas cifras llevan a la consejera de Empleo y Economía a asegurar que "Castilla-La Mancha es un paraíso cinegético y sería un error inasumible no promocionar uno de nuestros mejores y mayores recursos turísticos, en especial para los países de Centroeuropa y del continente asiático". Casero cita entre los beneficios del turismo cinegético su contribución a asentar la población y a generar riqueza y empleo en las zonas rurales. Así, muchos municipios de Castilla-La Mancha han convertido la caza y sus actividades paralelas en grandes fuentes de riqueza en los últimos años.

    Considerando estas premisas, la consejera afirma que es necesario que las Administraciones sigan potenciando productos turísticos paralelos al cinegético, dando a conocer al mismo tiempo la riqueza patrimonial y natural del territorio. Entre las actividades paralelas figuran el turismo de aventura, el enoturismo, el turismo gastronómico, el artesanal o el turismo rural. Opciones todas ellas que, en palabras de Casero, permiten "disfrutar de nuestro espectacular patrimonio, tanto natural como cultural".