Turismo y Viajes

La OMT dice que el riesgo de transmisión del ébola durante los viajes en avión es bajo

  • No obstante, las asociaciones internacionales solicitan controles de salida en los países afectados


La Organización Mundial del Turismo (OMT) asegura -en una declaración conjunta con Organización Mundial de la Salud (OMS), la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), el Consejo Internacional de Aeropuertos (ACI), la Asociación del Transporte Aéreo Internacional (IATA) y el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (CMVT)- que el riesgo de transmisión de la enfermedad por el virus del ébola (EVE) durante los viajes en avión es "bajo".

A diferencia de infecciones como la gripe o la tuberculosis, la OMT argumenta que el ébola no se transmite respirando el mismo aire (y las partículas en suspensión que contiene) que una persona infectada. La transmisión requiere el contacto directo con sangre, secreciones, órganos u otros fluidos corporales de personas o animales vivos o muertos infectados, exposiciones todas ellas improbables para el viajero medio. En cualquier caso, la Organización es taxativa al aconsejar a los viajeros evitar todos los contactos de este tipo y practicar de manera rutinaria una higiene cuidadosa, respetando pautas básicas como lavarse las manos.

La OMT añade en su comunicado que el riesgo de contraer la infección en un avión también es bajo porque las personas enfermas suelen sentirse tan mal que no pueden viajar.

La Organización Mundial de la Salud declaró el pasado 8 de agosto la EVE en África Occidental como Emergencia de Salud Pública de Interés Internacional a raíz de la propagación del virus por Liberia, Guinea y Sierra Leona. Para contener la enfermedad y ofrecer una respuesta internacional coordinada en relación a los viajes y el turismo se creó un Grupo de Trabajo sobre Viajes y Transportes en el que toman parte todas las asociaciones internacionales arriba mencionadas. Su función es supervisar la situación y proporcionar información oportuna a la industria de viajes y a los propios viajeros.

A tenor de la declaración conjunta divulgada, la OMT pretende transmitir tranquilidad al sector turístico haciendo hincapié -entre otros aspectos- en que la transmisión del virus suele producirse en el entorno familiar, en el cuidado de personas ya contagiadas y en las clínicas. "En Nigeria, los casos sólo están relacionados con personas que tuvieron contacto directo con un único viajero que fue hospitalizado tras su llegada a Lagos", apunta la Organización.

La OMT subraya además que una persona que está infectada sólo puede transmitir el virus a otros una vez haya comenzado a tener síntomas. Por lo general, éstos no se producen durante un período comprendido entre dos y 21 días, el denominado "período de incubación". Los síntomas son fiebre, debilidad, y dolores musculares, de cabeza y de garganta. Esto va seguido de vómitos, diarrea, erupciones cutáneas y, en algunos casos, hemorragias. "El riesgo de que un viajero se infecte por el virus del ébola durante una visita a los países afectados y desarrolle la enfermedad tras su regreso es muy bajo, aun cuando la visita incluya viajar a zonas en las que se hayan registrado casos", se reitera.

No obstante, las recomendaciones son claras para cualquier persona o viajero que permanezca en las zonas donde se han registrado casos de ébola: "éste debería solicitar atención médica ante el primer signo de enfermedad porque un tratamiento temprano puede mejorar el pronóstico".

Controles en los aeropuertos

Las asociaciones internacionales no pierden de vista que resulta esencial contener la enfermedad para evitar que se produzcan nuevos casos y que el virus salte a otros países. En este sentido han pedido a los países afectados que realicen controles de detección de salida a todas las personas en los aeropuertos internacionales, en los puertos marítimos y en importantes pasos fronterizos, con miras a identificar enfermedades febriles inexplicables que muestren síntomas compatibles con la infección por el ébola. "No se debería permitir viajar a ninguna persona que padezca una enfermedad compatible con la EVE, salvo que el viaje forme parte de una evacuación médica apropiada", se especifica en la declaración conjunta.

También se indica que las personas que han estado en contacto con personas infectadas por el ébola, o las personas que han contraído la enfermedad, no deberían realizar viajes internacionales, a menos que los viajes formen parte de una evacuación médica apropiada.

Con todo, se hace un llamamiento a evitar "medidas que creen interferencias innecesarias con los viajes y el comercio a escala internacional". Es decir, que en línea con las directrices de la OMS, no se recomiendan restricciones de viaje ni controles activos de detección de la enfermedad en la entrada a países no afectados por el virus o que no compartan frontera con los países afectados.