La nueva imagen de la nueva Iberia

La muy anunciada presentación de la "nueva imagen" de Iberia ha tenido como escenario la "nueva sede" de la compañía en Madrid, a la que ni siquiera se ha trasladado todavía su staff directivo. Pero ayer, 15 de octubre, sí que acudieron a ella.

Es la octava vez en sus 86 años de vida que Iberia cambia de imagen. Su presidente, Antonio Vázquez -que lo es también del holding matriz IAG- y su consejero delegado, Luis Gallego, han ofrecido las pertinentes explicaciones y justificaciones de por qué el nuevo aspecto corporativo de la antigua compañía de bandera. "La nueva imagen de la nueva Iberia", ha precisado Gallego, quien se ha referido a otra serie de cambios operados en paralelo: el nuevo edificio de Martínez Villergas donde se ha trasladado la sede; la llegada de la nueva flota de A-330 (el quinto se incorporará a finales de noviembre y otros tres irán llegando más adelante), equipada con nuevas y más confortables cabinas en Business y en Turista; el nuevo sistema tarifario; la nueva estrategia digital de www.iberia.com que se presentó en julio... Y ahora la marca, cuya renovación comenzarán a notar los pasajeros a finales de noviembre.

Los máximos directivos de Iberia han explicado que los cambios responden a la lógica de trasladar a la marca de la compañía una transformación más profunda que arrancó en realidad -según ha datado Marco Sansavini, director comercial y de clientes- hace tres años, más o menos cuando la fusión con British Airways comenzase a rodar. La problemática era cómo transmitir los cambios en esa Iberia que tiene "la suerte" -dice Gallego- de estar en IAG, abriéndose con ello a "un futuro brillante", sin perder la identidad de una marca que reconocen prácticamente el 100% de los españoles.

No es un asunto banal. "La marca puede llegar a pesar un 20% en la decisión de compra del cliente", ha remarcado el consejero delegado de Iberia. Sansavini, por su parte, ha remarcado lo meditado de la renovación en la marca, señalando que más de 8.000 clientes y empleados han sido consultados antes de definir la nueva imagen.

Para su presentación, Iberia desplegó sobre la fachada de sus oficinas el nuevo logo.

La corona... en la matrícula

La nueva imagen de marca salva estos escollos y simboliza una nueva etapa, aseguran Vázquez y Gallego. El presidente de Iberia ha resaltado tres ideas que permitirían conservar intacta esa identidad y, al tiempo, perfilar la "nueva Iberia":

-La primera, que "Iberia ha sido embajadora indiscutible de España durante 86 años y lo seguirá siendo, con la misma pasión y orgullo";

-La segunda, los signos "que siguen estando presentes", los colores de la bandera española y la característica corona de la aerolínea, aunque ésta ahora haya abandonado del logo de la compañía para ocupar un lugar mucho más discreto en el fuselaje de los aviones, junto a la matrícula para ser exactos. No obstante, Vázquez se reafirma en que Iberia está "extraordiariamente orgullosa de pertenecer al Reino de España".

-Y la tercera, un planteamiento de inversiones que "es posible porque formamos parte de IAG", el holding en el que Iberia se integra y al que Vázquez define como una "empresa entusiasmada y orgullosa" ante la capacidad de recuperación de Iberia. En este sentido, afirma  que la aerolínea está en el camino de ser "mucho más flexible, dinámica y competitiva, cualquiera que sea el precio del combustible y el competidor con el que haya de competir".