Turismo y Viajes
Las 10 "excusas" de las aerolíneas para no indemnizar a los pasajeros
Cuando un pasajero que ha sufrido la pérdida o demora de su equipaje, de un vuelo, una cancelación o cualquier otro incidente inicia el trámite de reclamarle a la compañía aérea, ésta suele responderle en muchas ocasiones con razones que suenan a excusa, pero en las que sobre todo -valga la redundancia- se "excusa" para no indemnizarle.
La startup Reclamador.es, que nació hace algo más de un año para gestionar la defensa de los derechos de los pasajeros ante este tipo de incidencias tan comunes, ha elaborado un listado de los 10 pretextos que suelen alegar las aerolíneas para zafarse de pagar. Antes de exponerlos hay que señalar la premisa legal que obra en estos supuestos, es decir, lo que la jurisprudencia señala como efectivamente razón admisible para que la aerolínea quede liberada de la obligación de indemnizar. Esta premisa legal estipula que la causa de la incidencia tiene que ser "ajena a ella, imprevisible e inevitable". Teniendo esto en cuenta, revisemos el listado:
1.- Avería del avión. Las aerolíneas están obligadas a mantener sus aviones en perfecto estado para volar, de modo que si se produce una incidencia por problemas técnicos sí tienen que indemnizar a sus pasajeros.
2.- Condiciones meteorológicas adversas. El tiempo es previsible en la mayoría de los casos y los retrasos por lluvia o nieve no eximen a las aerolíneas de sus obligaciones, salvo en casos extremos, por ejemplo cuando el mal tiempo obliga a cerrar el aeropuerto.
3.- Huelgas. Las huelgas del personal de la aerolínea "nunca" son ajenas a ella. Reclamador.es argumenta que en las últimas huelgas de Iberia, que provocaron cientos de cancelaciones, reubicaciones y gastos para los pasajeros, la compañía debería haber indemnizado a sus pasajeros con cantidades que oscilaría entre los 250 y los 600 euros, según la distancia del trayecto.
4.- El avión no está. En muchas ocasiones se les explica a los pasajeros que el retraso de su vuelo obedece a que el avión no ha llegado aún porque viene con retraso de otro destino. Aunque el hecho se presente como una contingencia que nada tiene que ver con la compañía, es ésta la que debe prever los horarios en los que opera.
5.- A la espera de viajeros en tránsito. La responsabilidad de fijar los criterios para que el avión salga en hora pertenece a la compañía, por lo que nunca puede ser una excusa.
6.- Congestión en las colas de despegue o aterrizaje. Esto forma parte de la rutina diaria de las aerolíneas, no pudiendo considerarse en consecuencia como una circunstancia extraordinaria.
7.- Repostaje de combustible. Es igualmente parte de la operativa habitual de las compañías aéreas, por lo que nunca podrá constituir una excusa.
8.- Descanso de la tripulación. Las aerolíneas suelen relacionar este tema con la seguridad de los vuelos, pero la clave es que son responsables de contar con el personal suficiente para cubrir las eventualidades.
9.- Enfermedad u otras causas personales del piloto. Una aerolínea no puede depender de que uno de sus pilotos no pueda trabajar ese día. Debe contar con personal suficiente para hacer frente a los vuelos que ha programado.
10.- Un rayo ha caído sobre el avión. Por muy impactante que suene que un rayo le caiga al avión, no se considera una circunstancia excepcional. El avión cuenta con pararrayos y con otros sistemas para prevenir incidentes y volar normalmente.
Ante cualquier tipo de "excusa", el consejo de Reclamador.es al pasajero es rotundo: reclamar sus derechos. "Ponerse en manos de expertos es la única forma de conocer nuestros derechos como viajeros", afirma Pablo Rabanal, CEO de la empresa.