NCL o cómo navegar hacia la sostenibilidad

El cambio climático y los desafíos que vienen están afectando a todos. El aumento de la temperatura debido a la emisión de gases de efecto invernadero y el clima impredecible son solo dos signos del cambio climático en curso. Las personas y todas las industrias deben reconsiderar sus hábitos y comportamientos para abordar el cambio climático de manera efectiva. La industria del turismo se ve muy afectada por ello y es una de las que está tomando medidas contra el cambio climático.

La industria de los cruceros a menudo se atribuye a la causa del cambio climático, pero ésta se ha esforzado durante años por operar de manera más sostenible. Norwegian Cruise Line (NCL) se ha comprometido con la sostenibilidad y está trabajando continuamente en un modelo de negocio sostenible.Como parte de su programa ambiental global 'Sail & Sustain', la naviera ha plasmado su total compromiso con la protección del entorno natural que abarca varias áreas de negocio, desde el uso de tecnología de vanguardia en sus infraestructuras para la reducción de emisiones y para la preservación de la biodiversidad hasta iniciativas en su programa de Responsabilidad Social Corporativa, firmemente integrado dentro de la compañía. Así, NCL tiene consolidada su lucha por un modelo sostenible, trabajando bajo cuatro premisas básicas: el aumento de su suministro sostenible, la disminución de los desperdicios en los vertederos, la inversión en tecnologías emergentes y la reducción de las emisiones de efecto invernadero.

Como parte de su programa de Responsabilidad Social Coorporativa, NCL es la única crucerista participante en Trash Free Seas Alliance®, iniciativa de la asociación Ocean Conservancy centrada en la conservación de los océanos y de la vida marina. También forma parte activa de la Guy Harvey Ocean Foundation, que trabaja por la preservación de la flora y fauna. Asimismo, Norwegian Cruise Line promueve campañas entre sus trabajadores para mitigar el impacto humano como limpieza de playas y comunidades, o la recolección de alimentos y ropa que pueda reutilizarse.

Otro de los puntos en los que se centra la compañía es la eliminación de los tan innecesarios plásticos de un solo uso, como las pajitas o botellas de agua. Estas últimas fueron reemplazadas por Just Water, cuya producción de envases se basa en un modelo eficiente con el medio ambiente. Y es que NCL tiene tolerancia cero ante todos los artículos que pueden acabar en el mar. A esto se le suma un riguroso programa de separación de residuos a bordo y sistemas avanzados de purificación de aguas residuales que cumplen con las estrictas normas del Báltico, y que ya está disponible en la mayor parte de la flota.

Como parte de la Cruise Lines International Association (CLIA), la naviera ha establecido disminuir las emisiones de CO2 un 40% de cara a 2030. Si bien la compañía invierte en tecnologías emergentes para alcanzar esta cifra, la mayoría de sus barcos ya utilizan plantas de tratamiento, como el Sistema de Limpieza de Gases Escape, que reduce la cantidad de óxido de azufre y partículas mediante la depuración de éstas antes de ser liberadas. En puerto, los cruceros de NCL generan su propia energía para proporcionar luz, calefacción y aire acondicionado, mientras que alguno de los barcos pueden conectarse a la tecnología de "planchado en frío", una red eléctrica terrestre que proporciona la mayor parte la energía.

Así, el compromiso de NCL con el medio ambiente demuestra que existen iniciativas y soluciones que respetan los recursos de nuestro planeta.