Trabajadores de Talgo cargan contra la dirección: "La gestión está siendo muy deficiente"
- La plantilla acusa a la dirección de falta de rumbo y transparencia en plena crisis industrial y corporativa
- CCOO exige al Gobierno que facilite la venta a Sidenor y advierte de medidas si no se protege el empleo
Víctor de Elena
La tensión crece en Talgo a menos de 72 horas de que finalice el plazo para formalizar la compraventa del 29,77% del capital en manos de Trilantic al consorcio vasco que forman Sidenor, BBK, Vital y el Gobierno Vasco. La sección sindical de CCOO en la compañía ferroviaria ha lanzado un duro comunicado en el que acusa a la dirección de una gestión "muy deficiente" y denuncia una deriva preocupante tanto en el plano industrial como en el corporativo.
"Navegamos sin rumbo claro y no vemos acciones suficientes que muestren mejoría", critican los representantes de los trabajadores, que apuntan directamente a la cúpula de la empresa y a los accionistas mayoritarios, el fondo británico Trilantic, por su falta de transparencia y su escasa interlocución con la plantilla.
El malestar no es nuevo, pero gana intensidad en un momento crítico para la empresa: con negociaciones abiertas con Renfe y un cambio en el accionista mayoritario pendiente de formalizar, el futuro de los más de 2.500 empleos directos que sostiene Talgo está en el aire. Desde el sindicato acusan a la dirección de mantener a los trabajadores al margen de este proceso de compraventa. "No tenemos noticia alguna, salvo las que podemos leer en la prensa", denuncian.
A esta falta de información se suma la preocupación por las tensiones con Renfe, cliente clave de Talgo. Los representantes sindicales recuerdan que la operadora es una empresa pública y, como tal, debería evitar decisiones que pongan en riesgo empleos industriales estratégicos. "No podemos pagar las personas trabajadoras los desacuerdos que puedan existir entre los que dirigen ambas compañías", advierte el comunicado.
La sección sindical de CCOO exige al Gobierno que asuma su responsabilidad como garante de una industria que calificó como estratégica. Recuerdan que el Ejecutivo intervino para bloquear la opa de la empresa húngara Ganz-MaVag y que ahora debe facilitar la operación con Sidenor para evitar el deterioro de la compañía. "Necesitamos que la venta se cierre antes de que el deterioro de la compañía sea irreversible", advierten.
El sindicato subraya la disposición de la plantilla al diálogo, pero también lanza una advertencia: están dispuestos a "luchar por sus puestos de trabajo con las medidas que sean necesarias". "Estamos hablando del pan de nuestras familias", recalcan.
La situación de Talgo ha escalado en los últimos meses, con un contexto de incertidumbre marcado por el bloqueo en la renovación de contratos con Renfe, el estancamiento en el cierre de la venta de la posición de Trilantic al consorcio vasco y las dudas sobre el futuro industrial de la firma, uno de los referentes del sector ferroviario español.
"La plantilla tiene capacidad y voluntad de remar de forma conjunta y alcanzar buen puerto", afirma el comunicado. Pero esa voluntad, añaden, choca con la ausencia de dirección estratégica y de medidas que apunten a una recuperación del rumbo. El sindicato considera que se está desaprovechando el capital humano y técnico acumulado por la empresa y alerta de que se está perdiendo tiempo valioso.
El texto concluye con un llamamiento a todas las partes implicadas —dirección, Renfe, Sidenor y Gobierno— para que "encuentren una solución inmediata" y eviten que Talgo naufrague. "La plantilla no se merece esta situación y el Estado no se puede permitir perder una industria como la nuestra", concluyen.