Transportes y Turismo

Paradores apunta a un récord de beneficios en 2024, superando los 35 millones de euros

  • Resaltó el "esfuerzo significativo" que Paradores está realizando para atraer a clientes internacionales

Noelia García
Madrid,

La presidenta de Paradores, Raquel Sánchez, ha sugerido que la empresa pública podría superar ligeramente los 35 millones de euros en beneficios previstos para 2024. "Lograremos un récord histórico", afirmó durante su intervención en el IV Foro Empresarial Catalunya, organizado por elEconomista.es en la sede de Foment del Treball. No obstante, ha abogado por ser prudentes.

Sánchez enmarcó estos resultados en el contexto de un sector turístico que, según ella, "funciona muy bien" y es el motor de la economía española, destacando que sus beneficios son amplios y positivos para la sociedad en su conjunto, minimizando el impacto de sus posibles externalidades negativas.

El sector turístico es uno de los motores económicos del país. De hecho, España recibió en agosto 11,1 millones de viajeros aéreos internacionales, lo que representa un aumento del 9,6% respecto al mismo mes del año anterior, según datos de Turespaña. En lo que va de año, el país ha acumulado la visita de 71,2 millones de pasajeros internacionales, un 11,9% más que en el mismo periodo de 2023.

Sánchez destacó que el modelo de turismo que impulsan en Paradores busca combinar lo sostenible con lo cultural, afirmando que "Paradores es un ejemplo" de este enfoque. "Es una empresa pública con atributos que nos hacen muy atractivos", explicó, y añadió que el debate actual sobre el turismo invita a cuestionarse "qué tipo de turismo queremos en nuestro país". Para ella, el objetivo es construir un turismo cada vez más sostenible e inclusivo, que no solo genere riqueza, sino que también la distribuya en todos los entornos.

Además, Sánchez quiso desmitificar la percepción sobre el perfil del cliente de Paradores, subrayando que "hay que romper esquemas u opiniones de que nuestro cliente es mayor o que el precio es muy elevado". En su opinión, Paradores ofrece una oferta diversificada, con productos y servicios adaptados a diferentes tipos de usuarios.

Estabilidad laboral

También señaló que Paradores enfrenta desafíos en la competencia dentro del mercado laboral turístico. Aunque reconoció la escasez de profesionales, subrayó que la estabilidad laboral que ofrece Paradores constituye una ventaja frente al sector privado. Respecto a la posibilidad de ofrecer alojamiento para sus empleados, especialmente en destinos como Ibiza, Sánchez indicó que la empresa podría seguir el ejemplo de otras compañías del sector y aplicar esta medida.

Sánchez enfatizó que, como empresa pública, "tenemos límites en cuanto a crecer en masa salarial", lo que se traduce en desafíos para atraer talento. Reconoció que el sector hotelero y de la restauración enfrenta una "falta de profesionales", lo que complica aún más la situación. Sin embargo, subrayó que compensan esta carencia con "el hecho de la estabilidad" laboral que ofrecen. "El sector hotelero tiene un mayor número de contratos temporales", indicó, poniendo como ejemplo el Parador de Ibiza, donde "nos resulta difícil competir con un sector que es muy dinámico".

Sánchez explicó que Paradores tiene "diferentes categorías en función de los Paradores" y que ofrecen primas de productividad. "Debemos buscar otros alicientes que no sean solo económicos", afirmó, enfatizando la necesidad de contener los costos debido a su naturaleza pública.

"Competir no es fácil en un entorno tan competitivo", reconoció, y añadió que los procesos de contratación "son muy rígidos", lo que se convierte en un impedimento. Sin embargo, destacó que funcionan en red, con algunos Paradores generando mayores ingresos que permiten sustentar a aquellos que no pueden fijar precios tan elevados. "Tenemos Paradores que, sin mermar la excelencia, tienen precios medios más ajustados y adaptados al entorno, y otros que nos generan beneficios que nos permiten mantener esta red", concluyó.

Atracción de clientes internacionales

Sánchez ha resaltado el "esfuerzo significativo" que Paradores está realizando para atraer a clientes internacionales, quienes actualmente constituyen el 35% de todos sus visitantes, una proporción que considera "bastante positiva", con una importante presencia de europeos, especialmente de Francia, Reino Unido y Alemania. Sin embargo, subrayó que también están ganando popularidad entre otros mercados. "El americano es el que más ha crecido", comentó, mencionando también el aumento de visitantes de Japón, China y Corea, que ya ha crecido un 33% el segmento de turistas asiáticos.

Según ella, expandirse en mercados extranjeros resulta "muy interesante", ya que estos turistas suelen prolongar sus estancias, incrementan el gasto y ayudan a reducir la estacionalidad en la actividad de la empresa.

Destacó que el modelo de Paradores es bien conocido y valorado fuera de España. "Es un modelo de éxito, que funciona y reporta beneficios", afirmó, remarcando la importancia de mantener la sostenibilidad en el centro de su enfoque.

Para fortalecer su posicionamiento en el extranjero, Sánchez detalló que Paradores mantiene acuerdos con turoperadores y agencias de comunicación y marketing, con el objetivo de seguir atrayendo a turistas internacionales hacia destinos menos masificados.

Recuperar patrimonio histórico

Paradores cuenta con un plan de inversiones de 200 millones de euros destinado a la remodelación de la red de hoteles, de los cuales 25 millones se destinarán a mejorar la eficiencia energética y 20 millones a tecnología. Paradores quiere desestacionalizar la oferta y atraer más clientes internacionales, especialmente en mercados clave como MICE, ocio e internacional. Este esfuerzo se enmarca dentro del plan estratégico 2023-2026, que busca preparar a la empresa para su centenario en 2028. Las actuaciones están orientadas a incrementar el confort de los edificios y hacerlos más sostenibles y eficientes energéticamente.

En su presentación, Sánchez indicó que "en el plan de inversiones hay una parte que va a la transformación digital y tecnológica", con 16 millones de euros destinados a ampliar la presencia en mercados internacionales y mejorar la integración tecnológica. "El mayor reto es esa integración con las agencias de viajes online", subrayó.

"Gran parte de esos fondos provienen de los fondos europeos", afirmó Sánchez, resaltando la importancia de invertir en bienes históricos y culturales para mejorar la eficiencia y la confortabilidad del cliente.

Sánchez destacó que planean renovar más del 50% de los Paradores, con intervenciones en todos los establecimientos. Por ejemplo, el Parador de Tortosa recibirá una inversión de 10 millones de euros, y el Parador de Artíes requiere una renovación importante. Se destinarán entre 32 y 33 millones a Paradores en Cataluña, y se realizarán intervenciones en lugares emblemáticos como Sigüenza, Zamora, Santiago de Compostela y Olite. Estas renovaciones implicarán cierres temporales, pero Sánchez subrayó la necesidad de no desaprovechar los fondos europeos para hacer Paradores más atractivos.

De hecho, este verano, el 33% de los clientes fueron nuevos, lo que refleja un cambio de tendencia y demuestra que los viajeros aprecian la calidad del servicio. "Podríamos tener muchos más, ya que contamos con un importante patrimonio", afirmó. Actualmente, la red de Paradores consta de 97 establecimientos, y tienen planes de abrir tres nuevos: uno en Molina de Aragón, otro en Ibiza y un tercero en Veruela, cerca de Zaragoza. Así, llegarán a 100 Paradores para 2028, coincidiendo con su centenario. También mencionó que existe un Parador en Portugal que opera como franquicia.

Asimismo, descartó planes de expansión internacional para Paradores en el corto plazo, señalando que la prioridad de la empresa es mejorar las instalaciones existentes y aumentar la afluencia de clientes.

¿Turismofobia?

La presidenta de Paradores afirmó que "hay que gobernar el fenómeno del turismo desde una perspectiva distinta", donde se busque la convivencia entre trabajadores, turistas y habitantes. En este contexto, mencionó que Barcelona está implementando medidas para seguir siendo una ciudad atractiva para los turistas, pero que también es necesario regular y que las comunidades autónomas y los ayuntamientos tienen competencias para hacerlo.

En cuanto a la denominada "turismofobia", Sánchez reflexionó sobre su impacto: "Todos tenemos que trabajar para tener un turismo sostenible y de calidad". Resaltó que España es el segundo país más visitado del mundo, pero también advirtió sobre las "externalidades negativas que hay que saber gestionar". Para ello, defendió la necesidad de adoptar medidas valientes en las políticas turísticas que se están desarrollando.

Sánchez destacó que hay disponibles 3.400 millones de euros en fondos para transformar el turismo en uno más sostenible. "Paradores es un modelo de referencia para un turismo de calidad", afirmó, enfatizando que aunque la gente se manifiesta en contra de las externalidades negativas, el turismo aporta mucho a las sociedades. "Aporta felicidad y es socialmente necesario; viajar es fundamental para el desarrollo humano y para romper prejuicios".

También destacó el crecimiento del turismo de interior, señalando que "si ofreces una buena alternativa de calidad, el viajero responde". Según ella, "tenemos un país tan rico que es momento de divulgarlo y enseñarlo más".

Ampliación del aeropuerto de Barcelona

Sánchez reafirmó su apoyo a la ampliación del aeropuerto del Prat, describiéndolo como "una fortaleza para nuestro turismo gracias a la buena red de infraestructuras que atrae a los visitantes internacionales".

"Cuando fui alcaldesa de Gavà, dejé claro que el aeropuerto era un aliado para el desarrollo económico", recordó, aunque subrayó que esta ampliación debe hacerse "con pleno respeto al entorno y a la convivencia pacífica de los pueblos y ciudades". En este sentido, aseguró que "el plan de ampliación garantiza eso y ahora está más cerca".

Efecto multiplicador del turismo

El turismo es un pilar fundamental de la economía española debido a su capacidad de generar ingresos significativos y promover el crecimiento económico en múltiples sectores. Los turistas gastan en alojamiento, restauración, transporte, atracciones y compras de souvenirs, entre otros.

Este gasto se traduce en ingresos directos para las empresas locales, que a su vez pueden contratar más personal, mejorar salarios, ampliar sus servicios o incrementar su producción.El efecto multiplicador de este gasto turístico se extiende a través de la economía, impulsando la creación de empleo, incrementando los ingresos fiscales y mejorando la calidad de vida en las regiones turísticas. Además, el turismo ayuda a dinamizar sectores indirectamente relacionados, como la agricultura, la artesanía y la cultura, promoviendo la sostenibilidad económica y contribuyendo a un mayor equilibrio en la balanza de pagos de España.