Un oso de dibujos, el millonario éxito de una región de Japón para atraer turismo

El oso Kumamon es el Mickey Mouse particular de la prefectura japonesa de Kumamoto. Al igual que Disney ha levantado todo imperio en torno a ese personaje animado, las autoridades de Kumamoto están construyendo parques temáticos en su honor en toda la región. El objetivo es atraer a los visitantes extranjeros una vez se acaben las restricciones en el país.

Kumamon es un adorable oso de pelo negro y mejillas sonrojadas que debutó como mascota oficial de su prefactura en 2011, con motivo de la inauguración de una nueva línea ferroviaria de alta velocidad a la isla suroccidental de Kyushu. Desde entonces, se ha convertido en la mascota regional de mayor éxito de Japón. Otras mascotas japonesas de gran popularidad son Hello Kitty y los Pokemon.

Asimismo, la prefactura de Kumamoto ha lanzado un amplio merchandising inspirado en este oso, desde artículos de papelería hasta ropa y mascaras. En la última década, este negocio ha generado más de 1,1 billones de yenes (7.935 millones de euros) en ventas.

Cabe destacar que uno de los factores que han permitido que la popularidad de Kumamon haya crecido tanto en tan poco tiempo es el enfoque adoptado por las autoridades japonesas sobre sus derechos de propiedad intelectual. Concretamente, ha permitido el uso casi completamente gratuito de su imagen, como demuestra que haya colaborado la web de viajes Fliggy, de Alibaba, y que también haya participado en una campaña de concienciación sobre la higiene lanzada por la agencia de cooperación japonesa para enseñar a los niños indios a lavarse las manos. Entre sus planes de futuro se encuentra la promoción de la nueva planta de microchip que Taiwan Semiconductor Manufacturing va a construir en Japón a finales de 2024.

Ahora que por fin Japón está suavizando las restricciones impuestas por la pandemia -el Gobierno del primer ministro Fumio Kishida anunció la semana pasada la eliminación del test negativo para los viajeros con las tres dosis de la vacuna-, se espera que el sector turístico de todo el país remonte.

En el caso de la prefactura de Kumamoto, las autoridades confían en que Kumamon sirva para atraer a los turistas extranjeros y recuperar los niveles prepandemicos. En 2019, el consumo del turismo en la capital de la prefectura generó 82.600 millones de yenes (más de 590 millones de euros). En ese año, ciudadanos de China, Taiwán y Hong Kong fueron sus principales visitantes.

Pese a la popularidad de Kumamon, la prefactura japonesa no lo tiene fácil, sobre todo porque los turistas que llegan por primera vez al país suelen priorizar Tokio, Osaka y Kioto, según señala una analista de Bloomberg Intelligence. En su opinión, es esencial que se lleven a cabo mejoras en las conexiones de transporte para facilitar la movilidad entre las principales ciudades de Japón.