Nadal pidió una ambulancia nada más ganar Roland Garros por sus problemas físicos

Rafa Nadal hizo ayer historia (por enésima vez) al conseguir su noveno Roland Garros. El de Manacor suma ya 14 Grand Slam e iguala a Pete Sampras con el mismo número de trofeos grandes. Sólo le queda por delante Roger Federer, en posesión de 17. Todo un hito plagado de sufrimiento. Es la otra cara de la victoria.

Porque ayer Rafa lo pasó muy mal para lograr tan ansiado título. El número 1 del mundo acusó (al igual que el serbio Novak Djokovic) las condiciones climáticas extremas que se vivieron en París.

Con temperaturas por encima de los 30 grados y un elevado porcentaje de humedad, jugar al tenis se convirtió en una tortura tal y como confesó su tío, Toni Nadal. El también preparador de Rafa afirmó que las primeras palabras de su sobrino nada más ganar la victoria y abrazarse a él fue pedir una ambulancia para que le pudieran inyectar algún tipo de suero. Estaba al borde de la deshidratación.

"Le comenté que estuviera tranquilo, que informaría al médico que y él ya sabría qué hacer en vestuarios", comento Toni Nadal, su fiel escudero en todos estos éxitos y victorias. El propio Toni comentó a varios medios que, en caso de que hubiera perdido el cuarto set (en el que venció a Nole) es probable que Rafa hubiera perdido este Ronald Garros.

"Sufría de muchos calambres. Seguramente Rafael habría sido derrotado", comentó. Al poco de acabar la ceremonia de entrega de trofeos, Nadal se marchó a vestuarios donde, en privado, recibió los cuidados médicos necesarios para recuperarse de semejante esfuerzo.