Telecomunicaciones y tecnología
Trabajadores de Foxconn, preocupados por los recortes de horas
Wu, de 23 años, es uno de las decenas de miles de inmigrantes de zonas rurales pobres que dotan de personal a la línea de producción de la planta de Foxconn en Longhua, en el sur de China, que ensambla las piezas de los productos para Apple y otras multinacionales.
Las concesiones de Foxconn, incluyendo el recorte de horas extras para sus 1,2 millones de trabajadores chinos mientras promete compensaciones que los protegerán contra la pérdida de ingresos, fueron respaldadas por Apple, que se ha enfrentado a la crítica y al examen de los medios de comunicación por la falta de seguridad de sus trabajadores y por utilizar empleados de bajo coste para fabricar sus caros teléfonos, ordenadores y otros dispositivos.
Sin embargo, a la entrada de la fábrica de Foxconn, muchos trabajadores no parecían creer que sus nóminas no se vayan a ver recortadas al reducirse sus horas. A algunos trabajadores de las fábricas chinas - que logran la mayor parte de sus ingresos con la gran cantidad de horas extras - les costará tiempo acostumbrarse a la idea de trabajar menos por el mismo salario
"Estamos preocupados porque tendremos menos dinero para gastar. Por supuesto, si trabajamos menos horas, significa menos dinero", afirmó Wu, empleado de 23 años de la provincia de Hunan al sur de China.
Foxconn dijo que reducirá las horas laborales a 49 por semana, incluyendo horas extras.
"Estamos aquí para trabajar y no para jugar, así que nuestros ingresos son muy importantes", dijo Chen Yamei, de 25 años y trabajadora de Hunan que dijo que llevaba trabajando en la fábrica cuatro años.
"Nos acaban de decir que solo podemos trabajar un máximo de 36 horas extras al mes. Os digo que muchos de nosotros no estamos contentos con esto. Creemos que sería razonable 60 horas extras al mes y que 36 horas son muy poco", añadió. Chen afirmó que ahora ganaba poco más de 4.000 yuanes (428 euros) al mes.
Foxconn es uno de los mayores empleadores de los 153 millones de trabajadores inmigrantes rurales que trabajan fueran de su lugar de origen. En comparación con otras empresas locales más pequeñas, los trabajadores dijeron que las plantas grandes son más limpias y seguras, y ofrecen más sitios de recreo.
Pero aún así, para la mayoría de los empleados de la planta de Foxconn en Longhua, que está dentro de la gran expansión industrial de la provincia de Guangdong (Cantón), la vida está dominada por la rutina repetitiva de la línea de producción.
En el exterior de la plata de Foxconn, empleados fuera de servicio se concentran en un pequeño centro comercial. Sus apiñados bloques de apartamentos están rodeados por peluquerías, tiendas de aperitivos, salas de juegos y cibercafés, donde muchos mientras están de descanso juegan con las videoconsolas o ven telenovelas de Corea y Hong Kong.
"No salgo mucho porque no hay mucho que hacer. Salgo a comer de vez en cuando", dijo Huang Hai, un varón de 21 años que dijo que llevaba dos años trabajando en la fábrica de Foxconn.
"Esta es una buena compañía para trabajar ya que las condiciones de trabajo son mejores que en muchas de otras fabricas pequeñas".
Huang estaba esperando a un amigo a las puertas del centro de reclutamiento de futuros empleados de Foxconn.
"No me gustaba mi primer trabajo en Foxconn porque era muy repetitivo. Era sobre todo trabajo manual y tenía que clavar clavos todos los días", aseguró Huang.
"Ahora es mejor porque trabajo con ordenadores".