Sociedad

El Gobierno dará prioridad a los parados y reducirá la contratación de inmigrantes en origen



    Madrid, 31 jul (EFE).- La secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, ha anunciado hoy que a partir de ahora la prioridad del Gobierno será recolocar a los desempleados nacionales y extranjeros y reducir la contratación de inmigrantes en origen.

    La secretaria de Estado ha hecho estas declaraciones en la presentación del libro "Inmigración y Mercado de Trabajo", un trabajo que analiza cómo afecta la crisis económica a la situación laboral de los inmigrantes.

    La responsable de Inmigración ha explicado que, el próximo mes de septiembre, el Gobierno revisará el catálogo de ocupaciones de difícil cobertura "para tener muy en cuenta la nueva situación económica" y ofrecer los empleos vacantes a los parados del mercado de trabajo que puedan realizar estos trabajos.

    Además, ha precisado, "obviamente" la actual coyuntura económica repercutirá en la contratación en origen porque "la prioridad del Ejecutivo será fortalecer el mercado interno, reforzar la formación ocupacional y recolocar a los desempleados", ha insistido.

    Por tanto, a partir de septiembre, ha subrayado Rumí, la contratación en origen será "complementaria a las recolocaciones, más reducida y con perfiles diferentes".

    Al mismo tiempo, el Ministerio "flexibilizará algunas medidas" para incentivar la movilidad geográfica de los trabajadores y promover el cambio de actividad.

    La secretaria de Estado ha explicado que para las campañas agrícolas de temporada, "como ya se está haciendo con la siembra de la fresa en Huelva", se buscará mano de obra entre los parados de España y después se recurrirá a la contratación en origen.

    Junto a las medidas del Gobierno, Rumí ha pronosticado que la actual coyuntura económica provocará una "inflexión" en la llegada de inmigrantes, que "estoy convencida" no llegarán en la misma cantidad que en los últimos años, que ha rondado los 200.000.

    Consuelo Rumí ha dicho, no obstante, que "aunque es difícil saber qué va a pasar en el futuro", el mercado laboral español seguirá necesitando inmigrantes aunque probablemente en menor medida que hasta ahora y para trabajos "cada vez más cualificados".

    Por su parte, Miguel Pajares (autor del informe) ha subrayado que la inmigración "sigue jugando un papel muy importante en la economía española" y que la llegada de inmigrantes al mercado laboral español no ha reducido las oportunidades de empleo ni los salarios de los españoles.

    Más bien al contrario, la inmigración ha favorecido a los nacionales porque ha facilitado su ascenso a categorías de empleo medias o altas, mientras que los extranjeros copan las más bajas, especialmente las mujeres.