Las perspectivas del BCE para los principales aspectos de la Eurozona se debilitan
La orientación de cara al futuro más explícita del BCE en la reunión del consejo de gobierno de ayer desató el entusiasmo entre la prensa, aunque para nosotros el mayor interés reside en el deterioro de sus perspectivas para los principales aspectos de la economía de la Eurozona. El presidente del BCE Mario Draghi declaró que los riesgos para la estabilidad de los precios "todavía" están equilibrados, lo que indica que los riesgos a la baja están comenzando a tomar la delantera. Asimismo, añadió que la perspectiva de inflación justifica una tendencia a la baja para los tipos de interés, poniendo énfasis en el punto de vista pesimista, y señaló los acontecimientos negativos para el crédito. Entre ellos se incluye el endurecimiento de las condiciones financieras como resultado de los acontecimientos a nivel mundial, lo que sirve para confirmar que el BCE no acompañará a la Reserva Federal en la reducción del estímulo en un futuro próximo. Por último, Draghi afirmó que la economía está avanzando "gradualmente" hacia una recuperación "gradual", lo que implica que la evolución del crecimiento en la Eurozona es más débil, o más gradual, de lo que se preveía. Nuestras expectativas para la reunión de agosto son que el BCE vuelva a hacer hincapié en su orientación de cara al futuro y que posiblemente recorte su tipo principal debido a que los riesgos a la baja para el crecimiento y la inflación son cada vez más evidentes.
Por Christian Odendahl.