Seleccion eE

El crecimiento plano de Rusia parece no tener remedio



    A medida que los datos peores de lo esperado para el cuarto trimestre de 2012 y el primer trimestre de 2013 siguen llegando, parece que la economía rusa prácticamente se ha estancado. El crecimiento casi se ha detenido en febrero (0,1%) y es poco probable que alcance el 2% en el primer trimestre, en contra de nuestra previsión del 3,3%. La desaceleración en el cuarto trimestre fue generalizada, debido al fuerte descenso de la inversión, ya que tanto las exportaciones como el consumo se estancaron. La producción industrial, que pasó del estancamiento a la contracción, fue la principal sorpresa negativa en el primer trimestre, lo que indica que es probable que la perspectiva negativa de los productores con respecto al futuro crecimiento se vea acompañada por una contracción de la acumulación de capital en el primer trimestre. Los responsables políticos siguen sin ponerse de acuerdo en el modo de volver a poner en marcha el crecimiento. Al mismo tiempo, la desaceleración del crecimiento pone más presión sobre unos ingresos presupuestarios que ya son menores de lo esperado. Dado que el espacio fiscal parece cada vez más reducido, la política monetaria (incluida la depreciación del tipo de cambio) es la única herramienta disponible. No obstante, el impacto de la flexibilización será limitado: a medio plazo, si no hay reformas estructurales, y a corto plazo, debido a que el traslado del aumento de la liquidez a los préstamos será limitado.

    Por Evghenia Sleptsova.