Los grandes fondos de inversión acumulan más dinero del que pueden gastar
- Los bajos tipos hacen que no estén buscando muchas oportunidades
¿Alguien cree que la economía global no tiene suficiente financiación? Fíjense en lo que está ocurriendo en el mundo de las grandes empresas de capital riesgo, esos capitalistas dedicados a proporcionar a las empresas incipientes ?o a las empresas en dificultades- dinero para seguir adelante y crecer.
Los grandes fondos del private equity están sentado sobre una montaña de dinero. Es lo que el sector llama su "pólvora seca". Si no se gasta su ingente liquidez en nuevas adquisiciones pronto, puede que tenga que devolvérsela a los inversores. Cerca de 200.000 millones de dólares captados sólo en 2007 y 2008 deben gastarse en los próximos 12 meses o deberán ser devueltos a los inversores.
Los ejecutivos del capital riesgo empiezan a estar ansiosos por la posibilidad de tener que ir de compras aceleradamente. Algunas firmas del sector han comunicado a los bancos de Wall Street que quieren ir a cazar elefantes, es decir, a buscar grandes operaciones con un valor de hasta 10.000 millones. "El reloj corre rápido para estos fondos", según Hugh McArthur, de la firma Bain & Company.
Por tanto, la carrera ha comenzado. Pero, por supuesto, hay un problema: "Gastarse esa pólvora seca probablemente dará lugar a demasiado capital persiguiendo demasiadas pocas operaciones en 2012", según McArthur. Los precios de adquisición probablemente se van a disparar, por culpa de que "muchas firmas están pujando por las mismas operaciones obvias", afirma Alastair Gibbons, socio de Bridgepoint Capital. Eso significa que es posible que veamos una serie de malas operaciones con rentabilidades aún peores.
Tal vez en una señal de desesperación, muchas firmas de capital riesgo se han metido cada vez más en un juego de la patata caliente, con una firma adquiriendo un negocio a otra en vez de comprarlo en los mercados o de sus propietarios fuera del mundillo del capital riesgo.
Por tanto, ¿hasta qué punto se fundamentan estas transacciones en objetivos de beneficios? Por primera vez en el sector, es posible que los intereses de los inversores diverjan de los de los gestores de los fondos. Se trata de un daño colateral inesperado de la caída de los rendimientos y de la política de liquidez de los bancos centrales.