Quiosco internacional: Alemanes, relájense

DIE ZEIT (ALEMANIA)

La canciller alemana nunca criticó abiertamente a Berlusconi: se limitaba a hacer caso omiso tanto de él como de su país. Pero Angela Merkel era especialmente popular en Italia: encarnaba todas las virtudes de las que carecían sus políticos: sentido del bien común, discreción, integridad. No obstante, desde hace unos meses, en Italia gobierna un hombre que, además de estas cualidades, posee otras que no tiene la canciller. Ciertas visiones del mundo que, unidas a su dominio de los medios económicos, le confieren una auténtica fuerza de decisión. Desde entonces, la imagen de Angela Merkel empezó a agrietarse. De ser un modelo irreprochable, se ha convertido en la maestra de escuela de mentalidad estrecha . Para Monti, "cuanto más demuestren los países endeudados que han comprendido los imperativos de la disciplina, más deberían relajarse los alemanes".