Un año después de la primavera árabe: evaluación de las vulnerabilidades
Cuando se aproxima el primer aniversario del comienzo de la primavera árabe, siguen existiendo grandes divisiones entre los importadores y los exportadores de la región de Oriente Medio y Norte de África, ya que los países importadores desde Marruecos a Jordania se enfrentan a mayores déficit fiscales y al incremento de los niveles de deuda. En el periodo subsiguiente a los levantamientos, las desordenadas transiciones políticas agravan las debilidades económicas y provocan el aumento de la incertidumbre, mientras que las refriegas y las demandas populares continúan presionando a los líderes de los países productores de petróleo. Egipto, donde el proceso político está gobernado por una complicada dinámica, destaca como el país más vulnerable. Del mismo modo, Siria parece estar al borde de una guerra civil, debido a la rebeldía del actual régimen y a las profundas divisiones existentes dentro de oposición siria, mientras que las próximas elecciones en Irán y el aumento de la hostilidad contra EEUU y la comunidad internacional en general también hacen que se incrementen los riesgos en la región.
Por Maya Senussi, Ayah El Said, Amir Kamel y Rachel Ziemba.