Sanidad
EEUU deja de mirar para otro lado con la homeopatía: la FDA estudia sus riesgos
Históricamente, EEUU ha decidido mirar a otro lado en cuanto a la regulación de la homeopatía se refiere. Pero esa postura podría cambiar pronto: la FDA, regulador de alimentación y medicinas, va a realizar una consulta pública para evaluar si debe ajustar su política al crecimiento de la industria.
La homeopatía no es algo nuevo. La idea de que los mismos elementos que provocan las enfermedades pueden curarlas si son administrados en dosis pequeñas data del siglo XVIII. En 1938, un senador estadounidense, Royal Copeland (quien era homeópata), consiguió que se aprobara una ley que clasificó a los tratamientos homeopáticos como medicinas. Más tarde, en los años 70, volvieron a ponerse de moda.
Hasta ahora, los reguladores no habían hecho nada a pesar de que la inmensa mayoría de científicos apunta a que estos remedios simplemente no funcionan. A pesar de ello, cada año la homeopatía consigue ventas multimillonarias.
Riesgos para la salud
El problema es que ahora ya no es que no funcionen, sino que empieza a haber preocupación por los efectos nocivos de algunos tratamientos: desde 2009, la FDA ha emitido casi 40 advertencias a los fabricantes de productos homeopáticos y ha ordenado la retirada de tres. Algunos productos incluían una cantidad de zinc que hacía perder el sentido del olfato y otros incluían cantidades tóxicas de belladona.
En 2007, 3,3 millones de estadounidenses se gastaron 2.900 millones de dólares en tratamientos homeopáticos, según las estimaciones de la CDC, el centro para el control de enfermedades del país. Sin embargo, la industria asegura que el mercado es mucho más pequeño, algo que no es casual.
Hasta ahora, aunque la FDA tenía la potestad de regular la homeopatía, pero como el mercado era tan pequeño, la agencia decidió que la mayor parte del trabajo de investigación sobre estos remedios recayera sobre la propia industria homeopática.
Sin necesidad de aprobación
En 1988, la FDA publicó una guía "que básicamente permitía a estos medicamentos llegar al mercado sin aprobación previa", explica a Cynthia Schnedar, directora de cumplimiento del Center for Drug Evaluation and Research, dependiente de la FDA.
Los reguladores permiten la venta de cualquier sustancia listada en la Homeopathic Pharmacopeia, un documento publicado desde el siglo XIX y que es actualizado por una asociación sin ánimo de lucro de la industria. Los remedios solo necesitan cumplir con ciertas normas de fabricación y solo pueden ser comercializadas en algunas condiciones.
Schnedar reconoce que es hora de que la FDA reevalúe esta política. "Hemos visto una expansión enorme de este mercado y también hemos empezado a ver problemas de seguridad y calidad", añade. Un panel de nueve miembros de la FDA escuchará las opiniones desde todos los puntos de vista y en las sesiones se recopilarán datos sobre los riesgos y beneficios, así como de las recomendaciones regulatorias, añade.
Los críticos de la homeopatía creen que estas acciones llegan tarde. Stepehen Barrent, un psiquiatra retirado que se dedica a acabar con mitos, ya pidió en 1994 que se exigieran a los productos homeopáticos los mismos estándares de seguridad y efectividad que al resto de medicamentos.
Seguridad vs libre elección
La agencia desde entonces ha actuado contra productos homeopáticos que prometían la cura del cáncer o que se vendían como sustitutos de vacunas, pero Barret cree que no se ha hecho lo suficiente para advertir al consumidor de los medicamentos sin receta. "No se puede separar seguridad de efectividad. Si no es efectivo, no es seguro".
La industria homeopática, por su parte, se defiende diciendo que debe ser el consumidor el que juzgue. "Millones de estadounidenses utilizan medicamentos homeopáticos y quieren tener acceso a ellos", asegura John P. Borneman, CEO de Hyland´s Homeophatic y presidente de la asociación de la industria que publica el Homeophatic Pharmacopeia. "Estas medicinas son muy efectivas, a la gente le gustan y son parte de la elección del consumidor en EEUU".
Las autoridades alrededor del mundo no comparten esa visión sobre la efectividad de la homeopatía. El último ha sido el gobierno australiano, que ha concluida que "o hay condiciones sanitarias en las que haya evidencias fiables de que la homeopatía sea efectiva".
Se venden como vitaminas
El Reino Unido llegó a la misma conclusión hace cinco años, y la asociación de Instituciones Sanitaras de EEUU asegura que hay muy pocas pruebas que apoye estas prácticas y puntualiza que "algunas conceptos clave de la homeopatía son inconsistentes con los conceptos fundamentales de la química y la física".
La homeopatía en EEUU se ha vuelto más popular desde que dejó de ser un medicamento con receta y se puede vender en las farmacias. "Las medicinas homeopáticas no desaparecieron. Comenzaron a verse, o incluso a etiquetarse, como el equivalente a suplementos vitamínicos", explica Naomi Rogers, historiador de la Universidad de Yale que se ha dedicado al estudio de la cuestión.
En la consulta de esta semana, la FDA decidirá si el enfoque actual es "apropiado para proteger y promover la salud pública dado el tremendo crecimiento del mercado homeopático".