Sanidad

Los MIR necesitan de la supervisión de unas plantillas muy estresadas

  • El Gobierno da también luz verde a la contratación de recién licenciados
  • El Código Civil señala que un error es responsabilidad del tutor y el Estado, además del MIR
El Hospital Gregorio Marañón. Foto: Efe

Javier Ruiz-Tagle

El domingo por la noche el ministro de Sanidad dio luz verde para que los residentes (MIR) en el último año prorrogaran su actividad si su especialidad coincide con las necesidades del sistema en la crisis del coronavirus, como pueden ser neumología, geriatría , medicina interna o pediatría.

También habilitó a las comunidades autónomas para que refuercen sus plantillas con la contratación con carácter extraordinario y transitorio de médicos con el MIR aprobado, pero sin título de especialistas. Horas más tarde, el portavoz del Ministerio para esta pandemia, Fernando Simón, explicó que además de esas propuestas también estarían recién jubilados o trabajadores temporales.

La falta de profesionales no es un problema nuevo del sistema sanitario y desde hace un año se están haciendo esfuerzos por contrarrestarla. Sin embargo, esta pandemia ha provocado estas medidas inverosímiles en cualquier otra circunstancia. De forma normal, cualquier residente que esté formándose necesita de un tutor que le supervise el trabajo que realiza.

Esta vigilancia va disminuyendo con los años, si bien las responsabilidades ante un error médico son tanto del residente como de su supervisor y, en ultima instancia, también del responsable de su contrato. En una situación como la actual, con unas plantillas médicas pidiendo refuerzos ante el nivel de estrés que sufre el sistema, esta labor se complicará por la carga de trabajo que existe.

Tanto los MIR como los recién licenciados tendrán un papel "defensivo" en esta crisis

Siguiendo al Código Civil, el MIR, en su relación especial con el sistema de salud, lleva a cabo acciones individuales que pueden afectar directamente a los pacientes generando posibles responsabilidades como consecuencia de su acción u omisión. Sin embargo, al actuar bajo la supervisión y tutela del médico tutor y, a su vez del organismo que lo contrata, se generan además responsabilidades jurídicas entre ellos.

Tanto los MIR como los recién licenciados tendrán un papel "defensivo" en esta crisis, según señalan fuentes profesionales. Servirán de apoyo para tareas poco complejas, pero el grueso de las urgencias y las complicaciones de UCI seguirán bajo el paraguas de unas plantillas cada vez más estresadas.