Salud Bienestar

El nutriente para hacer crecer el cabello de forma rápida y saludable


Raúl González Pérez

Las nuevas tendencias, en la industria de la belleza, evolucionan casi a diario: productos estrella, elementos recomendados por influencers y demás hechos análogos. Ahora bien, cuando se trata de la salud del cabello cabe destacar que "hay una base científica que vale la pena explorar".

O al menos así lo ha argumentado el cosmetólogo, doctor en Farmacia y fundador de Twelve Beauty, Pedro Catalá, en una entrevista con '20minutos'. A su juicio, los aminoácidos, nutrientes que hacen que crezca fuerte y sano, juegan un papel vital en la salud del cabello.

Dos tipos

De acuerdo a la información proporcionada por el especialista, hay dos tipos principales: esenciales (histidina, isoleucina, leucina, lisina, metionina, fenilalanina, treonina, triptófano y valina) y no esenciales (alanina, arginina, ácido aspártico y asparagina).

"Nuestro cuerpo puede producir aminoácidos no esenciales, pero los esenciales deben obtenerse a través de nuestra dieta", ha recalcado Catalá. Al parecer, estos contribuyen a la integridad estructural del cabello, haciéndolo fuerte y resistente a la rotura.

A tener en cuenta

Con respecto a la retención de la hidratación, los aminoácidos como la metionina y la cisteína ayudan al cabello a retener la humedad, evitando la sequedad y, por tanto, la fragilidad. Por si fuera poco, son determinantes en la reparación de la fibra capilar expuesta al peinado con planchas térmicas, tratamientos químicos y otros factores ambientales.

Para que los aminoácidos lleguen a donde tienen que llegar para fortalecer nuestro cabello existen tres vías. La primera de ellas es la dieta: una alimentación equilibrada "rica en proteínas" es la base para un cabello sano. En este punto, los lácteos, las legumbres y las nueces tienen mucho que decir.

La segunda vía son los suplementos de aminoácidos, que son una opción para aquellos a los que les cuesta satisfacer sus necesidades de proteína con la alimentación. Eso sí, hay que consultar con el personal médico antes de tomar cualquier pastilla 'añadida'. Por último, conviene señalar los tratamientos tópicos.