La importancia de la flexibilidad a la hora de practicar cualquier deporte
Los estiramientos, para ganar flexibilidad, muchas veces se convierten en los grandes olvidados de todos los entrenamientos, ya sea por falta de tiempo o por cansancio ya que se deben hacer al finalizar el entrenamiento, o por simple vaguería.
La flexibilidad no es sólo la capacidad que tenemos de estirar hasta cierto punto, sino también lo es la de regresar a su estado original recuperando su forma. Es una cualidad que todos los deportistas practican, claro síntoma de la importancia que tiene en el deporte.
Cuando entrenamos los músculos de nuestro cuerpo hacemos que las fibras que los conforman crezcan y se desarrollen, acumulando tensión en ellos y volviéndose más rígidos. Mediante los estiramientos relajamos los músculos tras el ejercicio, ganando en flexibilidad y movilidad, como apunta Knowi.
Mantenernos flexibles nos evitará muchas lesiones como por ejemplo esguinces y tendinitis que se producen debido a la realización de un movimiento de una amplitud mayor a la habitual y para la que no estamos preparados como consecuencia a la excesiva rigidez en la zona afectada. Además la flexibilidad nos ayuda a mantener las fibras musculares jóvenes durante más tiempo, pudiendo entrenar con menor riesgo.
Un músculo relajado tiene mayor capacidad de realizar una contracción rápida pudiendo desarrollar más fuerza de forma mucho más veloz. La potencia es la mezcla entre velocidad y fuerza en el movimiento por lo que los estiramientos mejoran también nuestra potencia muscular.
En muchas ocasiones por falta de flexibilidad no se trabajan bien todo el músculo por el simple hecho de no ser capaz de poder realizar el movimiento necesario completo, acortando así los músculos.
Estirar de manera adecuada y regularmente no sólo se nota la diferencia a la hora de practicar deporte, sino en el día a día. Con los estiramientos adecuados verás tu capacidad física mejorada con un mayor rango de movimientos, que antes parecía imposible realizar.