Salud Bienestar

El médico que vinculó vacunas y autismo cometió un "fraude"



    WASHINGTON (Reuters) - El doctor Andrew Wakefield, el médico británico que publicó estudios que relacionaban ciertas vacunas con el autismo, cometió un "fraude elaborado" al falsificar datos, indicó British Medical Journal.

    Los editores de la revista dijeron que no era posible que Wakefield haya cometido un error sino que falsificó los datos para su estudio, que convenció a miles de padres de que las vacunas son peligrosas y al que se responsabiliza de los actuales brotes de sarampión y paperas.

    La revista, conocida como BMJ, respaldó su posición con una serie de artículos de un periodista que utilizó registros médicos y entrevistas para mostrar que Wakefield falsificó los datos.

    Por ejemplo, los informes revelaron que el médico, que incluyó información de sólo de 12 niños en su estudio, realizó un seguimiento al menos a 13 y muchos mostraban síntomas de autismo antes de haber sido vacunados.

    Los temores de que las vacunas pudieran causar autismo no sólo hicieron que los padres evitaran vacunar a sus hijos, sino que además obligaron a costosas reformulaciones de muchas inmunizaciones.

    "¿Quién preparó este fraude? No hay duda de que fue Wakefield", escribieron la editora de BMJ, doctora Fiona Godlee, y compañeros en un comentario.

    En 1998, la revista médica The Lancet, rival de BMJ, publicó un estudio de Wakefield y colaboradores que relacionaba la vacuna triple contra las paperas, el sarampión y la rubeola (MMR) con el autismo.

    Los otros investigadores luego retiraron sus nombres del estudio y The Lancet se retractó formalmente por el artículo en febrero.

    Por su parte, Wakefield negó las acusaciones.

    "El estudio no es una mentira. Los resultados que obtuvimos se replicaron en cinco países alrededor del mundo", dijo el médico a CNN el miércoles.

    Un comité disciplinario del Consejo Médico General de Reino Unido dijo en febrero de 2010 que Wakefield presentó su investigación de una forma "irresponsable y deshonesta" y llevó al descrédito a la profesión médica.

    Godlee y sus colaboradores dijeron que el trabajo "no se basó en un mal procedimiento sino en un fraude deliberado".

    Muchos expertos han tratado de mostrar que las vacunas causarían autismo. Pero ningún estudio logró presentar una relación clara.

    El sarampión es uno de los virus más contagiosos conocidos, con 10 millones de infecciones anuales y 164.000 muertes, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).

    La vacunación redujo el número de muertes por sarampión un 78 por ciento, según datos de la OMS. Pero el rechazo de algunos padres a la inmunización contribuyó a su reaparición en Reino Unido.