Salud Bienestar
Las desigualdades en el tratamiento del cáncer echan raíces en España
- El número de diagnósticos de la enfermedad aumentarán un 50% en las dos próximas décadas
Rocío Antolín
En el camino hacia la recuperación del sistema sanitario, después de la crisis del coronavirus, los expertos ven necesario un plan de choque que haga frente a las desigualdades en el diagnóstico y tratamiento del cáncer. Prevén que el número de casos aumenten un 50% en las próximas décadas llegando a los 19,3 millones de sufrientes en 2040. Los datos están contemplados en el informe "Camino a la recuperación" de la Fundación para la Excelencia y la Calidad de la Oncología (ECO).
En 2021, Europa puso en marcha su plan en la lucha contra el cáncer y después España modificó su estrategia de actuación, pero no ha sido suficiente. "No podemos seguir con el modelo que tenemos para tratar esta patología. Hay que modificarlo", denuncia la jefa del servicio de oncología médica del Complejo Hospitalario de Navarra, Ruth Vena. Los expertos, de la mano de la fundación, han elaborado un modelo de asistencia al cáncer que se basa en la estrategia nacional y concuerda, sobre todo, con el europeo.
"Queremos recuperar la mayor parte del terreno perdido", recalca el presidente de ECO, el doctor Rafael López. El documento incluye un programa de cribado igualitario para todos los pacientes y el refuerzo de la prevención primaria y de los circuitos asistenciales con el objetivo de buscar la máxima eficacia en el diagnóstico precoz, inclusive los aún no diagnosticados debido a las consecuencias del coronavirus. También se contempla la introducción de la innovación médica como, por ejemplo, los nuevos fármacos.
Los profesionales sanitarios coinciden en que la sanidad debe ser equitativa, y sostenible social y económicamente. "El contexto es complicado porque el sistema sanitario es mas frágil para hacer proyecciones estratégicas que antes. Por una parte, se ha descapitalizado, más por parte del gobierno que de las comunidades autónomas; y por otra, los retos son más complejos. Es imprescindible liderar desde lo profesional y el ámbito de pacientes pueden impulsar estas estrategias", explica José Martínez Olmos, profesor de la Escuela Andaluza de Salud Pública.
Por otro lado, existe una desigualdad digital entre las comunidades autónomas y sus hospitales. Según la jefa de servicio oncológico la innovación de diagnóstico "es bastante crítica". España no cuenta en su cartera con los biomarcadores obligatorios, en muchas ocasiones, a la hora de administrar un fármaco. En cuanto al acceso de nuevos medicamentos hay una media de 453 días entre la autorización europea hasta la aprobación en España. "Estos tiempos cada vez son más largos", afirma.
Una de las consecuencias del coronavirus es el impacto que ha tenido en los diagnósticos. Hay pacientes que aún no han sido diagnosticados o lo han sido tarde. "Estamos viendo a pacientes con enfermedades más avanzadas (lo que supone un gasto mayor para el sistema sanitario). Los ensayos clínicos se vieron perjudicados por la falta de reclutamiento y la desviación excesiva hacia la búsqueda de un tratamiento para el covid", afirma el presidente de la Asociación Española de Hematología y Hemoterapia, Ramón García Sanz. Ahora, la situación está volviendo a la normalidad. "En 2021, volvimos a superar el número de muestras extraídas para el diagnóstico de cáncer respecto a 2019", recalca el presidente.