Renta variable

Apple invierte 1.000 millones en el 'Uber' chino para tratar de alejarse de Alphabet

  • Alphabet ya le arrebató el título de firma más grande del mundo
  • Se produce una vez que la tecnológica llegó a perder los 90 dólares
  • Alphabet podría tener que pagar una indemnización de 9.000 millones

Juan Antonio Montoya, Agencias

Cerca de 880 millones de euros (unos 1.000 millones de dólares). Eso es lo que Apple ha invertido en la empresa de transporte compartido Didi Chuxing, considerada el equivalente de Uber en China.

Con sede en Pekín, Didi Chuxing es el resultado de la fusión, en febrero de 2015, de las empresas emergentes chinas Didi Dache y Kuaidi Dache, que hasta entonces competían por el liderazgo del sector en el país, y, a principios de ejercicio, tenía un valor de mercado estimado en alrededor de 16.500 millones de dólares. "Estamos extremadamente impresionados por el negocio que han creado y su excelente equipo de liderazgo y esperamos apoyarles a medida que crezcan", señala Tim Cook, consejero delegado del gigante de Cupertino. "Didi ejemplifica la innovación de la comunidad de desarrolladores informáticos de China", afirma.

Este movimiento se produce una vez que la empresa tecnológica llegó a perder en bolsa los 90 dólares ?nivel en los que estaba establecido el stop loss para la estrategia? tras repartir un dividendo de 0,57 dólares.

Sin embargo, debido a este pago se ha decidido reducir el stop loss hasta los 89,43 dólares descontando la cantidad que ha repartido entre sus accionistas. Una cifra que supone el dividendo más alto repartido por Apple. Las acciones de la compañía norteamericana llevan descendiendo desde finales del mes de abril, lo que nos hacía vigilarla de cerca, pero su consejo de compra lleva a elMonitor a continuar apostando por ella.

La compañía de la manzana llegó a caer durante la semana pasada a su mínimo de casi dos años, lo que provocó que perdiera su posición de empresa más valiosa del mundo durante algunos momentos en detrimento de Alphabet (la antigua Google). La caída que ha sufrido hasta la cota de los 510.000 millones de dólares de capitalización la ha dejado en una posición débil y otros titanes sel sector tecnológico ya amenazan con destronarla.

Alphabet, pendiente de Oracle

Es lo que consiguio Alphabet durante algunas sesiones del mes de febrero arrebatando así este título a la firma que preside Tim Cook y ahora ha vuelto a lograrlo, aunque sólo fuera durante unas horas. Y es que la capitalización de Alphabet también encuentra nubes en su horizonte: podría tener que hacer frente a una indemnización de 9.000 millones a Oracle.

Desde 2012 lleva activo el caso. En estos momentos, un jurado determinó que el buscador había violado los derechos de autor, provocando una serie de apelaciones que terminaron en 2014 con una decisión que revertía el veredicto original, encaminándose a este nuevo juicio.

Oracle, mantiene en pie una denuncia valorada en 9.000 millones. Si al final el fallo da la razón a Oracle y la recientemente renombrada como Alphabet tiene que hacer frente al pago de 9.000 millones, esta cifra significaría el 12,7 por ciento de los ingresos estimados para el presente ejercicio: 71.022 millones de dólares.

Igualmente, si en vez de los ingresos, tenemos en cuenta el beneficio proyectado para 2016 por el consenso de mercado que recoge FactSet, 23.555 millones de dólares, que Oracle gane el juicio sería una noticia todavía peor para la firma de Mountain View, ya que el pago significaría un 38,2 por ciento de sus ganancias.

Los inversores se están tomando con optimismo la noticia del contencioso entre ambas compañías y Alphabet suma en la semana del juicio una subida superior del 1,4 por ciento mientras que Oracle hace lo propio por encima del 1 por ciento.

Según declaraciones de las que se ha hecho eco Reuters, Mike Bailey, director de investigaciones de FBB Capital Partners, señala que ni siquiera una gran sentencia en favor de Oracle tendría mucho impacto en los inversores, ya que sería un cargo por una única vez.

El litigio entre las tecnológicas deriva de que Oracle sostiene que la otrora Google robó parte de su código Java protegido por la ley de derechos de autor para desarrollar su sistema operativo Android, utilizado por la mayoría de teléfonos móviles del mundo y por los que está ingresando miles de millones de dólares.

Sin embargo, Alphabet indica que, amparándose en el uso justo que estipula la ley de derechos de autor que permite usar material protegido siempre que se emplee para desarrollar algo innovador, obró de forma lícita.

Su presidente ejecutivo, Eric Schmidt, ha asegurado que creía que su empresa podía usar libremente Java porque él personalmente dio a conocer el lenguaje de programación en el año 1995 cuando era un alto ejecutivo de Sun Microsystems, la firma que lo inventó y fue posteriormente adquirida por Oracle.