Política

Los vecinos lamentan que la Cañada no esté en el acuerdo Comunidad-Ayuntamiento



    Madrid, 29 oct (EFE).- La Federación Regional de Asociaciones de Vecinos de Madrid (FRAVM) ha lamentado que Comunidad y Ayuntamiento no hayan incluido a la Cañada Real en el acuerdo que han suscrito hoy para erradicar el resto de asentamientos chabolistas de la capital.

    "Nos sorprende que, de repente, uno de los casos más grandes en cuanto a sus dimensiones, al número de gente que afecta y a la repercusión que está teniendo, no aparezca", ha dicho a los periodistas el presidente de la FRAVM, Ignacio Murgui, presente en el acto en el que han estampado sus firmas la presidenta regional, Esperanza Aguirre, y el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón.

    Murgui ha lamentado que en el acuerdo entre las dos administraciones para erradicar los núcleos de El Cañaveral, Mimbreras II, Santa Catalina y El Ventorro, "no estén contabilizadas ni las infraviviendas de la Cañada Real ni otras, incluidas las 'verticales' diseminadas en edificios de la ciudad".

    Además ha recordado que "desde hace meses" han pedido a las administraciones central, autonómica y local "que se sienten a negociar en una mesa en la que estén representados los vecinos, para tratar la urgencia de algunos problemas que se están viviendo en la Cañada Real, de acceso a equipamientos básicos, a derechos básicos y a unos mínimos de salubridad".

    La explicación a por qué no aparece la Cañada Real en el acuerdo firmado hoy la ha dado el gerente del Instituto de Realojamiento e Integración Social (IRIS), Javier Ramírez: "la Cañada no es un núcleo chabolista".

    Ramírez, en declaraciones a la prensa, ha admitido que "hay un problema de chabolismo en la Cañada" pero ha advertido de que "más del 90 por ciento son construcciones ilegales pero no son chabolas".

    "Una chabola es una construcción de materiales de desecho, de cartones, no de ladrillos, por mucho que las casas se hayan construido ilegalmente", como ocurre en la Cañada Real, donde se calcula que viven 35.000 personas en construcciones de todo tipo.

    Además, el gerente del IRIS ha asegurado que ninguno de los ayuntamientos afectados -Madrid, Rivas, Coslada, San Fernando de Henares y Getafe- se ha dirigido a este organismo para reclamar su ayuda en este ámbito.

    "Para que un núcleo chabolista sea tal los ayuntamientos tienen que decir que existe y nadie dice que la Cañada Real sea un núcleo chabolista en el día de hoy", ha subrayado.

    A su juicio, lo que hay en la Cañada es "un problema de urbanismo", más bien "disciplina urbanística", en el que la administración competente son los ayuntamientos.

    Ellos son "los que dejan que se ocupen sus suelos de una forma ilegal", ha recalcado Ramírez, aunque, según ha dicho, sin querer "echar la culpa" a los ayuntamientos.

    Por su parte, el portavoz del Grupo Municipal Socialista de la capital, David Lucas, ha manifestado en rueda de prensa que "parece mentira que una ciudad que pretende ser olímpica todavía tenga núcleos chabolistas".

    En su opinión, que esto suceda después de "20 años de gobierno del PP" demuestra "la pasividad del Ayuntamiento" ante estos asuntos.

    A su vez, el portavoz municipal de IU, Ángel Pérez, ha alertado del "riesgo" de que con los asentamientos de infraviviendas incluidos en el acuerdo suscrito hoy "suceda lo mismo que con la erradicación del Salobral y de Las Barranquillas" y muchos de sus habitantes no puedan ser realojados y acaben, ironizó, en "la colonia residencial" de la Cañada Real.

    Para la Portavoz de IU en la Asamblea de Madrid, Inés Sabanés, la firma del protocolo, "en el que se excluyen los asentamientos de la Cañada Real Galiana, evidencia claramente que el Gobierno regional prefiere seguir actuando como si no pasara nada".