Política

Telefónica inaugura su nueva sede bajo el lema de la sostenibilidad



    Madrid, 8 oct (EFE).- La nueva sede central de Telefónica en Madrid inaugurada hoy por los Reyes, el Distrito C, es, según el director de patrimonio de la compañía, José Luis Escobar, "como un rascacielos, pero en horizontal", que pretende ser un ejemplo de sostenibilidad.

    Aquí la gente no sólo trabaja, también va al gimnasio, al banco, a la farmacia, a la peluquería o deja a sus niños en la guardería, afirmó.

    El proyecto es obra del arquitecto Rafael de la Hoz, el mismo que en la actualidad trabaja en los planos del nuevo edificio de Repsol YPF en Madrid.

    La disposición horizontal del conjunto equivaldría en vertical a cuatro torres de cincuenta plantas, como las que dominan el horizonte desde los antiguos terrenos de la ciudad deportiva del Real Madrid.

    Al ser vertical, el conjunto "no es agresivo visualmente y está muy integrado en el entorno", señaló Escobar.

    Sobre 160.000 metros cuadrados de terreno se han edificado 367.370 metros cuadrados y cada elemento utilizado en la construcción pretende contribuir a la sostenibilidad.

    Lo que más llama la atención del Distrito C, situado en el barrio madrileño de Las Tablas, es la gran marquesina que cubre sus 17 edificios.

    La marquesina aisla los edificios, pero a la vez es la instalación solar en una cubierta más grande del mundo, con 20.000 metros cuadrados y 16.100 paneles solares.

    La decisión de que las fachadas fueran de cristal no fue casual. Los vidrios empleados, de origen reciclado en un 33 por ciento, incrementan la luminosidad en un 40 por ciento.

    En conjunto, el edificio consigue una reducción del consumo eléctrico del 30 por ciento y la emisión de 13.000 toneladas menos de CO2 al año.

    Hasta la construcción del Distrito C, los trabajadores de TELEFÓNICA (TEF.MC)estaban esparcidos por las distintas sedes de la empresa en el centro de Madrid.

    Para compensar el traslado a una zona tan alejada del centro, se dotó al complejo de los servicios básicos, de una amplia red de comunicaciones -incluido el Metro- y se ideó para funcionar como una pequeña ciudad.

    El gimnasio, que vive su hora punta a las siete y cuarto de la mañana, está abierto a los empleados de Telefónica y al público general, igual que la guardería, en la que gatean 150 bebés.

    El restaurante, gestionado por la cadena italiana Autogrill, sirve 9.000 comidas diarias y es uno de los más grandes de Europa, con 2.500 sillas.

    El espíritu del Distrito C es abierto, destacó el director de patrimonio, en el recinto no hay vallas y cualquiera puede pasear por sus jardines.