Política

Un empresario detalla sus pagos y comisiones a la administración andaluza a cambio de contratos

    La juez Alaya recogió el testimonio de este empresario. <i>Imagen: EFE</i>


    José Antonio González -empresario sevillano y administrador único de Fitonovo, compañía dedicada a la conservación de zonas verdes- ha reconocido a la jueza Alaya que pagó 700.000 euros en comisiones, lo que en cierto argot se conoce por mordidas, a funcionarios de Sevilla, Jaén, Cádiz o Huelva. Algo que su empresa tenía asumido como natural. La Junta de Andalucía podría estar implicada en otro fraude masivo de 2.000 millones de euros.

    Uno de los casos más llamativos fue la entrega de 70.000 euros en una caja de zapatos a IU de Sevilla a cambio de la conversión de 11 campos de fútbol de albero a césped. Entonces, la formación de izquierdas gestionaba el Instituto Municipal de Deportes. Así fue parte de relato a la juez.

    Ventanas, teléfonos, viagras

    Según González Baro -recoge el diario El Mundo, quien ha tenido acceso al contenido de la declaración que éste hizo ante la magistrada Alaya-, "una vez concluidos e inaugurados los campos de fútbol, Izquierda Unida le pidió, estando próximas las elecciones municipales, una colaboración económica, y accedió", detalla.

    Presuntamente, el contratista González sobornó a IU, a la que abonó 70.000 euros, con gastos como estos: 16.000 euros en cambiar las ventanas de la vivienda de un funcionario del Ayuntamiento de Sevilla, al que supuestamente tenía a sueldo; costeó el gasto telefónico de otro empleado municipal, al que al parecer pagaba una nómina fija, y hasta sufragó con "300 o 500 euros" la Viagra a un directivo de la empresa pública Adif en Zaragoza.

    Contratista estrella

    Este tipo de pagos convirtieron a Fitonovo en un contratista estrella de distintas administraciones públicas. La empresa asumió como algo natural el pago de 'mordidas' (pagos de comisiones) que le sugerían con más o menos descaro los funcionarios con poder de decisión, así como partidos políticos como Izquierda Unida.

    El padre de José Antonio, Rafael González Palomo, el verdadero propietario de Fitonovo, ya reconoció a la juez que entregó un sobre de 30.000 euros, que le dijeron que "era para el PSOE".

    Ante Alaya, el hijo admitió por su parte haber repartido entre 2003 y 2013 al menos 700.000 euros en comisiones a funcionarios y cargos públicos, un desembolso -señala el diario El Mundo- cuya mitad fueron a parar al bolsillo de Francisco Amores, jefe de servicio de Parques y Jardines del Ayuntamiento de Sevilla, entonces gobernado por PSOE e IU.

    El empresario también mantuvo que el responsable de carreteras de la Diputación de Sevilla, Carlos Podio, cobraba "de 10.000 a 12.000 euros por campaña". No obstante, matizó que quienes pagaban a Podio eran las empresas Martín Castilla o Maygar que eran las que subcontrataban a Fitonovo y después le descontaban las 'mordidas' del precio final.

    A estos 700.000 euros habría que sumar otros presuntos pagos en especie como coches, ordenadores o unas obras en la sede socialista de Sevilla. Los movimientos de Fitonovo alcanzaron a otros ayuntamientos andaluces de Jaén, Cádiz y Huelva.

    Fitonovo se convirtió en la segunda empresa que más adjudicaciones del Ayuntamiento sevillano recibió con cargo al Plan E, superada únicamente por Construcciones Camarena.