Política
Quiroga, a los votantes del PP: "No vamos a decepcionar a nadie"
La presidenta del PP vasco, Arantza Quiroga, ha afirmado, en relación a la controversia suscitada por la designación de la persona que ocupará la secretaría general del partido en Euskadi, que "no van a decepcionar a nadie" y ha apelado "a la responsabilidad y a la altura de miras". Quiroga amagó con dimitir ante la crisis.
Quiroga ha realizado estas manifestaciones en Vitoria, al término de la reunión de la Junta Directiva del PP vasco, en la que no se ha abordado el tema de la secretaría general del partido, cuestión sobre la que existen diferencias entre la presidenta y el sector alavés del partido, surgidas después de que se diera a conocer la intención de la líder del partido de que Iñaki Oyarzabal no siguiera ocupando esta responsabilidad.
La presidenta del partido propuso al concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Vitoria, Manuel Uriarte, ocupar esta responsabilidad, pero el edil ha renunciado a desempeñar esta labor, alegando razones personales.
Quiroga pide "altura de miras"
Tras concluir la Junta Directiva, Quiroga ha indicado que el PP es un partido con una trayectoria que, "muy especialmente" en el País Vasco se merece "responsabilidad de todos, altura de miras y no vamos a decepcionar a nadie".
El amago de Quiroga
La presidenta del PP vasco, Arantza Quiroga, amagó este lunes con presentar su dimisión por la fuerte crisis interna abierta en el PP vasco, apenas tres días antes que arranque el Congreso que va a clausurar el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, según han informado a Europa Press fuentes 'populares'.
Quiroga lanzó el órdago de marcharse en una reunión celebrada con los tres presidentes provinciales del partido, Alfonso Alonso (Álava), Borja Sémper (Guipúzcoa) y Antón Damborenea (Vizcaya) para intentar cerrar un acuerdo en torno al nuevo secretario general del PP vasco.
El anuncio de Quiroga en febrero de prescindir del actual 'numero dos' del PP vasco, Iñaki Oyarzábal, desató la caja de los truenos en el partido. El PP alavés apoyó su continuidad y se abrió entonces un enfrentamiento interno que ya dura varias semanas.
El encuentro finalizó sin ningún acuerdo sobre quién puede convertirse en sustituto de Oyarzábal, si bien los presidentes provinciales lograron convencer a Quiroga para que reconsiderara su decisión y no tirara la toalla.