Política

La infanta Cristina, ante el juez: "Mi marido y yo no hablamos de negocios en casa"

    La infanta Cristina antes de declarar. <i>Imagen de EFE</i>


    La infanta Cristina de Borbón afirmó el pasado 8 de febrero ante el juez de Palma de Mallorca José Castro, instructor del caso Nóos' que ella y su marido, Iñaki Urdangarín, no hablan en casa de sus negocios, al ser preguntada por la presencia de ambos, junto a sus hijos, en un balcón del Ayuntamiento de Alcalá de Henares con ocasión de la Cabalgata de Reyes de 2003. Aizoon, que ambos compartían al 50%, realizó en esos días negocios con dicho Consistorio. Así aparece en una parte de la declaración prestada por la hija del Rey ante el juez instructor número 3 de Palma, cuya transcripción ha sido notificada este jueves a las partes, en la que se la inquiró por su presencia ese día en la localidad madrileña.

    El juez preguntó a Cristina de Borbón si conocía a Rafael Guijosa, que fue jugador junto con Iñaki en el equipo de Balonmano del Barça, así como por su relación con el Ayuntamiento de Alcalá de Henares, a lo que la Duquesa de Palma respondió negativamente.

    Dijo también que no sabía si Aizoon había cobrado por algún proyecto con dicha Corporación, a lo que el juez Castro le precisó que, dado dicho desconocimiento, debía precisarle que este extremo sí se había producido.

    El magistrado le mostró un correo que Guijosa le remitió a su esposo el 7 de enero de 2003, dos días después de dicha Cabalgata, en la que éste le dice que, tal y como habían quedado, le envía parte del trabajo que está realizando y en el que cree que el Duque podría colaborar. "Míralo tranquilamente y ya veremos", le decía el exjugador según la transcripción a la que ha tenido acceso Europa Press.

    Sin control de gastos

    La infanta negó en la declaración que prestó como imputada el pasado 8 de febrero

    ante el instructor del 'caso Nóos', el juez José Castro, haber

    desarrollado cualquier actividad de gestión en Aizoon. "Yo no he controlado los gastos de Aizoon, ni he controlado sus cuentas", aseguró la hija del Rey. "La aprobación de las cuentas anuales de los ejercicios de 2006 y 2007 fueron firmadas, se aprobaron por unanimidad y usted firmó como secretaria de la Junta", le planteó el magistrado en un momento de las casi siete horas de declaración.

    Castro, en concreto, le preguntaba por la concesión por parte de Aizoon de varias créditos, con los que el propio Urdangarin habría recibido cerca de 280.000 euros. "¿Sabe alguna razón por la que estos préstamos no se documentaron adecuadamente?? le pregunta el juez, ante lo que la Infanta contestó con un "no lo sé". La hija del Rey ofreció la misma respuesta cuando Castro le preguntó sí se han devuelto esos préstamos.

    La infanta defendió que no conocía qué parte de sus gastos por viajes personales y familiares eran cargados en realidad a las cuentas de Aizoon: "No llevo el control de los gastos de viajes", le dijo la hija del Rey al instructor del 'caso Nóos'. El juez Castro le había preguntado sobre el viaje que realizó junto a su marido y sus cuatro hijos a Río de Janeiro (Brasil) en el año 2009, cuyos gastos se cargaron a las cuentas de Aizoon.

    "Se encargó mi marido de pagarlo, mi imagino, yo no lo pagué, no llevo el control de los gastos de viajes", dijo la imputada antes de reconocer que fue "un viaje familiar privado" que nada tenía que ver con la actividad de Aizoon.

    "Me ofende, Señoría"

    La infanta, al ser preguntada sobre si pudo haber sido utilizada como escudo fiscal al frente de la sociedad Aizoon, aseguró que "no, ni lo hubiese aceptado, ni me consta". "Casi me ofende, Señoría", subrayó al respecto durante su declaración como imputada el pasado 8 de febrero.

    "Yo entiendo que hay preguntas que pueden ser ofensivas, no es mi intención ofenderla señora, créame, pero es lo que sale de la causa", rebatió en ese instante el magistrado, recordando cómo el notario que participó en la constitución de Aizoon, Carlos Masiá, advirtió de los problemas que podría acarrear exponer a la Infanta a los avatares de esta empresa, llegando a asegurar que su presencia suponía "un escudo fiscal ante Hacienda".

    Según Masià, realizó esta advertencia al asesor fiscal del Instituto Nóos, Miguel Tejeiro, quien le respondió que "no habría problema" puesto que, con la Infanta al frente de Aizoon, habría "un trato especial" por parte de la Agencia Tributaria.