Política
La huelga ensució Madrid con más de mil toneladas de basuras
Finalizada la huelga de limpieza en Madrid, que ha durado trece días, aún faltan al menos otros tres días para que la ciudad recobre el aspecto que tenía antes de los paros, según cálculos realizados ayer por los sindicatos de limpieza. Aguirre secunda a Botella en su petición de una ley de huelga
Un plazo que causa poca sorpresa, habida cuenta de que la empresa pública Tragsa, contratada por el Ayuntamiento de Madrid para cubrir los servicios mínimos no realizados por las concesionarias, recogió mil toneladas de basura sólo entre el sábado y el domingo pasados.
No acaban ahí los estragos de la huelga, pues a las empresas titulares del servicio les corresponde ahora reponer las papeleras, cubos y contenedores que resultaron dañados durante los actos violentos. A tenor de los datos del Ayuntamiento, los destrozos afectan a 1.556 de estos utensilios, cuyo coste de reposición asciende a 596.000 euros.
Extinguido el conflicto, llegan las recapitulaciones. La alcaldesa, Ana Botella, celebró ayer el final del "calvario", así como que la solución del mismo se haya producido sin "despidos" para los trabajadores. La regidora, no obstante, achacó parcialmente la huelga a un "pulso político" contra ella -lo declaró a la cadena Cope-, si bien admitió que "a quien han atacado es a los madrileños". Precisamente, Botella había pedido el domingo una ley de huelga que pusiera "fin a los perjuicios a los ciudadanos".
El respaldo de Aguirre
Ayer, la alcaldesa popular recibió el respaldo de la presidenta del PP, Esperanza Aguirre, quien reclamó "una ley de huelga ya" para que no se repitan sucesos como los de Madrid, resaltando el "vandalismo" y que "ha habido piquetes que se han dedicado a sacar bolsas de basura de los contenedores". Asimismo, el también popular Alberto Núñez Feijóo instó al Gobierno a aprobar una ley de huelga que delimite este derecho cuando afecte a los servicios públicos.