CiU y ERC dan marcha atrás en el impuesto sobre refrescos

CiU y ERC han renunciado a aplicar, al menos por el momento, dos de los impuestos que figuraban en su pacto de gobernabilidad sellado en diciembre. Se trata del gravamen sobre las bebidas azucaradas y la Euroviñeta. Mas pide consumir productos catalanes

Con el primero de ellos, que había contado con la oposición de los grandes productores de refrescos, la Generalitat pretendía recaudar unos 22 millones de euros anuales. La Asociación Nacional de Fabricantes de Bebidas Refrescantes, Anfabra, incluso había planteado ir a los tribunales si el Gobierno catalán acaba aprobando esa tasa. Por su parte, la Euroviñeta deberían pagarla "los vehículos pesados de mercancías que atraviesen Cataluña por vías de gran capacidad de titularidad catalana".

Sí en cambio verá la luz la recuperación del Impuesto de Sucesiones y Donaciones, un tributo que el presidente Artur Mas decidió suprimir en su práctica totalidad en 2011 o la creación de un impuesto sobre viviendas vacías. La próxima semana el partido de Artur Mas y ERC sellarán su acuerdo en el Parlament sobre cómo se aplicarán los nuevos impuestos que se recogen en el pacto de gobernabilidad.

Se trata de una moción que supone una cierta relajación en las exigencias que ERC planteó en un inicio. La moción también asume una modificación al alza del Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos e insta a aplicar de forma "inmediata" el Impuesto sobre Depósitos Bancarios para que tenga efectos sobre el Presupuesto de 2013.