Política

ERC exige a CiU frenar los recortes para investir presidente a Artur Mas

  • Rajoy se ofrece como apoyo de Gobierno a cambio de que renuncie a la agenda soberanista
  • El empresariado catalán prefiere la 'sociovergencia' antes que la creación de un frente nacionalista


Entre la espada y la pared se encuentra Artur Mas. Con los 50 diputados obtenidos por CiU en las elecciones, tiene la responsabilidad de formar el próximo Gobierno de la Generalitat, pero los dos grupos parlamentarios que podrían ayudarle (ERC, con 21 diputados, y PP, con 19) le piden que renuncie a una parte esencial de su ideario. Mientras ERC le exige que frene los recortes en políticas sociales y que suba los impuestos, el PP se ofrece a apoyarle siempre y cuando renuncie a la agenda soberanista de CIU, algo a lo que el president se niega pese al varapalo electoral.

El presidente de ERC, Oriol Junqueras, aseguró que su partido no se plantea estar en el próximo Gobierno catalán y que, como segunda fuerza política en el Parlament, se propone liderar la oposición. Sin embargo, se mostró abierto a pactar con CiU "una agenda nacional clara y concisa" que incluya la convocatoria de un referéndum de autodeterminación, así como un giro económico y social que comporte replantear los ingresos y gastos de la Generalitat y rebajar las medidas de austeridad.

Para Junqueras, " los objetivos de carácter nacional y los económicos van unidos y son indivisibles,", por lo que advirtió a Mas de que ERC "no avalará más recortes" en servicios básicos; exigirá "la supresión del euro por receta sanitaria" porque lo consideran "profundamente injusto", y como alternativas para conseguir más ingresos propondrá restaurar el Impuesto de Sucesiones para las rentas más altas e implantar un gravamen sobre transacciones financieras que paguen los bancos.

De igual modo, el líder de ERC exigió a CIU una ruptura total con el PP, ya que en la actualidad muchos ayuntamientos catalanes están gobernados por los populares con el apoyo de CIU. El caso más importante es el de Badalona, una de las grandes poblaciones incluidas en el área metropolitana de Barcelona. Por su parte, los nacionalistas retienen la Presidencia de la Diputación de Barcelona gracias al apoyo del PP.

Según Junqueras, CiU se ha equivocado al plantear el proceso soberanista como un liderazgo personal, pero también "se equivocan" el Gobierno español y los partidos estatales al considerar que dicho proceso ha quedado frenado con el retroceso de Artur Mas y de su formación".

Referéndum

Por la tarde, Mas respondió a la oferta de Junqueras y aseguró que CiU no renunciará a la convocatoria de un referéndum soberanista y anunció que "es bastante posible que el referéndum se produzca en los próximos cuatro años. Hay una amplia mayoría en Cataluña a favor de este referéndum. Éste era nuestro compromiso y seguimos manteniendo estos principios".

Sin embargo, reconoció que, debido al resultado electoral, CiU no puede liderar en solitario el proceso y pidió al resto de grupos nacionalistas que "asuman sus responsabilidades", en clara alusión a ERC. También recordó a los republicanos que para conseguir llegar al objetivo nacional hay que asumir la responsabilidad del día a día, que consiste en "pagar las nóminas a los funcionarios" y por eso les reclamó el apoyo a su futuro Gobierno.

Rajoy: "Un fiasco"

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, aseguró que el resultado de las elecciones catalanas demuestra que la estrategia política de Artur Mas ha sido un "fiasco", ya que el apoyo recibido por CiU en las urnas "no responde a sus expectativas". Además, reprochó al presidente de la Generalitat que haya sido "desleal con quien le estaba apoyando", si bien se ha mostrado dispuesto a colaborar con el próximo Gobierno catalán como hasta ahora, según adelantó en el Comité Ejecutivo Nacional del PP en la sede del partido en Madrid.

Según Rajoy, Mas ha convocado elecciones "sin ninguna razón", puesto que tenía apoyos tanto del Gobierno de España (le ha prestado soporte a través del plan de pago a proveedores y después con el Fondo de Liquidez Autonómico) como del Partido Popular de Cataluña en términos políticos. Por eso, ha sentenciado que el presidente de la Generalitat "ha sido desleal con quien le estaba apoyando".

Por su parte, el líder del PSC, Pere Navarro, no cerró ayer la puerta a apoyar la investidura de Mas, pero ha considerado muy difícil esta posibilidad ya que CiU no tiene "credibilidad" tras "incumplir por completo el acuerdo de investidura de 2010 con el PSC". La posibilidad de crear un Ejecutivo sociovergente es la posibilidad que más agrada a los empresarios catalanes.